MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
Guterres ha pedido a todas las partes que respeten el Derecho Internacional Humanitario y "hagan todo lo posible" para proteger a los civiles, reafirmando que los responsables de las violaciones de la ley deben rendir cuentas.
Asimismo, ha hecho un llamamiento para que se pueda acceder sin obstáculos a la prestación de asistencia humanitaria urgente y servicios esenciales a través de todos los canales. "La seguridad de los organismos de Naciones Unidas y sus socios es crucial", ha manifestado, tal y como se lee en un comunicado.
Mientras que el secretario general ha reiterado su solidaridad con el pueblo birmano y "sus aspiraciones de un futuro inclusivo, justo y pacífico", ha remarcado su compromiso en trabajar con los socios regionales e internacionales para "poner fin a la violencia".
Este mismo miércoles varios grupos de resistencia de la zona han registrado cerca de una veintena de civiles en ataques de la junta militar, denunciando decenas de ataques a lo largo de la última semana en la región central de Sagaing.
El número de personas desplazadas en el país ha superado ya los dos millones de personas y necesitan con urgencia alojamiento seguro, alimentos y servicios básicos, según la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), que ha señalado que los combates entre el Ejército birmano y los grupos rebeldes de resistencia en el norte del país se han extendido al noroeste, sureste y el estado de Rajine.
Además, el bloqueo de las rutas de transporte, la interrupción de los servicios de telecomunicaciones, el cierre de aeropuertos clave y la reciente imposición de la ley marcial en municipios de varios estados están obstaculizando el acceso humanitario. Sin embargo, a pesar de estos desafíos, los socios humanitarios continúan brindando asistencia vital a los civiles en el norte de Shan --cerca de la frontera con China--, incluido dinero en efectivo, alimentos y otros artículos.