LOS ÁNGELES (AP) — Los investigadores estatales identificaron repetidamente riesgos de incendio y de seguridad en un espacio de almacenamiento arrendado bajo una autopista elevada de Los Ángeles antes que ardiera en un incendio provocado el pasado fin de semana, según muestran los documentos.
El incendio, avivado por materiales inflamables almacenados bajo la calzada —en violación del contrato de arrendamiento de la empresa—, causó el cierre de un tramo de la autopista Interestatal 10 cerca del centro de la ciudad durante días, congestionando el tráfico mientras las cuadrillas trabajan sin descanso para repararlo. Según las autoridades, se espera que todos los carriles vuelvan a abrirse el martes, mucho antes de lo previsto inicialmente, que era de tres a cinco semanas, para reparar el tramo de 1,6 km de longitud, con unas 100 columnas de soporte.
Los documentos fueron publicados por el Departamento de Transporte de California el viernes, un día antes que los investigadores dijeran que habían identificado a una “persona de interés” y difundieran dos fotos en una “notificación de alerta de crimen” publicada en las redes sociales. Las autoridades dijeron el sábado que están pidiendo la ayuda de la población para identificar a la persona.
Aunque los investigadores no han dicho cómo se inició el fuego, el incendio fue alimentado por palés, autos, materiales de construcción, desinfectante de manos y otros artículos que se almacenan bajo la autopista en virtud de un programa poco conocido que ahora está bajo escrutinio. El gobernador Gavin Newsom dijo esta semana que las autoridades del estado volverán a evaluar la práctica de arrendar espacios bajo las carreteras para obtener dinero para proyectos de transporte masivo.
Apex Development Inc. ha arrendado los terrenos bajo la Interestatal 10 desde 2008. Aunque una de las condiciones del contrato estipulaba que no se permitiría almacenar allí materiales inflamables o peligrosos, los inspectores estatales señalaron condiciones problemáticas durante años.
Los propietarios de dos de las empresas que subarrendaron la propiedad dijeron que también habían advertido del peligro de incendios y otros riesgos relacionados con las personas sin hogar que vivían bajo la autopista. Newsom dijo anteriormente que, aunque el subarriendo puede ser legal si la empresa recibe permiso de los reguladores estatales y federales, Apex no lo recibió.
