BOGOTÁ (AP) — El presidente colombiano Gustavo Petro intenta dar un nuevo impulso a su plan de gobierno reuniéndose con políticos, empresarios y trabajadores mientras sus principales reformas no avanzan en el Congreso y su popularidad ha disminuido.
En la agenda oficial de Petro el miércoles está programada la visita al palacio presidencial de Álvaro Uribe Vélez, expresidente (2002-2010) y cabeza del partido opositor Centro Democrático, que en el Congreso se ha opuesto a la reforma al sistema de salud del gobierno junto a un grupo de legisladores independientes que, aunque no han logrado la mayoría, han aplazado la discusión.
Desde febrero, Petro radicó en el Congreso una reforma que busca modificar profundamente el sistema de salud que rige en Colombia desde hace 29 años para convertirlo en uno con menos intermediación de privados y en el que el Estado tenga un mayor control del dinero y del servicio. El Congreso ya aprobó aproximadamente la mitad de la reforma.
“Es positivo que el presidente esté dialogando con todos los sectores y particularmente con los que son más alejados de él políticamente”, dijo a The Associated Press Yann Basset, profesor de Ciencia Política de la Universidad del Rosario.
Sin embargo, Basset consideró que no es seguro que la reunión entre Petro y Uribe —que representa sólo a un sector político— derive en la posibilidad de desbloquear la agenda del gobierno en el Congreso, donde depende más de todos los partidos políticos, incluidos los independientes que también pidieron ser atendidos.
Para Carlos Andrés Arias Orjuela, consultor en comunicación política, Petro pasa por un momento difícil y después de un año y medio de gobierno sólo ha logrado la aprobación de la reforma fiscal, mientras en el Congreso no avanzan tanto otras como la del sistema de salud y el de pensiones.
Arias Orjuela señaló a AP que también pesan los resultados de las recientes elecciones de alcaldes y gobernadores en las que su movimiento político no salió victorioso y su baja popularidad, según las encuestas.
La desaprobación a la gestión de Petro alcanzó el 66% entre 700 personas entrevistadas por la firma Datexco entre el 15 y 17 de noviembre en 29 ciudades del país. En la anterior medición del 8 al 10 de noviembre Petro había registrado un 64% de desaprobación.
La víspera Petro se reunió con poderosos empresarios dueños de conglomerados económicos y medios de comunicación como Luis Carlos Sarmiento Angulo, Alejandro Santo Domingo y Carlos Julio Ardila en la casa presidencial para invitados especiales en Cartagena, al norte del país.
Petro llegó al poder en 2022 como el primer presidente de izquierda con un discurso en contra de las élites y prometiendo redistribuir los recursos. Petro ha dicho que aunque alcanzó la presidencia, el “verdadero poder” lo ostentan los grupos económicos.
Tras concluir la reunión con los empresarios Petro hizo una declaración oficial en la que enumeró los puntos que trataron sobre educación, desarrollo de la tierra fértil y de la economía popular. Además, anunció que se instalarán mesas de trabajo para “lograr propuestas concretas que se puedan viabilizar en Colombia”.
Arias Orjuela consideró que aunque es común que los presidentes se reúnan con sectores empresariales, el caso de Petro es particular: “los presidentes anteriores de una u otra forma provenían de las élites, había una relación cercana. En este caso Petro tuvo una cercanía al cierre de su campaña electoral para que los empresarios no le tuvieran miedo a su elección y luego empezó a criticarlos”.
