CIUDAD DE MÉXICO (AP) — El gobierno de Estados Unidos anunció el martes que decidió “restringir los visados” a operadores de vuelos chárter que trasladan a migrantes a Nicaragua, una práctica que en los últimos meses ha fomentado el tráfico de miles de cubanos y haitianos en su afán por ingresar sin documentos al territorio estadounidense.
En un comunicado, el Departamento de Estado informó que puso en marcha “una nueva política de restricción de visados” para personas que operan vuelos de alquiler a Nicaragua, principalmente con “migrantes irregulares”.
Indicó que esas compañías aéreas “han estado ofreciendo vuelos y cobrando precios a nivel de extorsión” y han puesto a los migrantes “en una peligrosa ruta por tierra” hacia la frontera con Estados Unidos.
Explicó que muchos de esos viajeros no tienen permiso para entrar o residir en Estados Unidos “y a menudo son devueltos a sus países de origen”, tras gastar altas sumas de dinero en trayectos no exentos de riesgo.
Las restricciones de visados se aplicarán a “los propietarios, los ejecutivos y/o los altos funcionarios de las empresas que ofrecen vuelos de chárter a Nicaragua”, diseñados principalmente “para los migrantes irregulares a los Estados Unidos”, señaló el informe, sin identificar a esas personas ni su nacionalidad. Tampoco precisó cuándo comenzarán a restringir los visados.
El comunicado exhortó a “haitianos, cubanos y otros, que busquen las muchas vías seguras y legales disponibles para migrar a los Estados Unidos”, ya que al no tener permisos legales de entrada y permanencia pueden ser devueltos a sus países de origen.
Entre agosto y octubre de este año, más de 260 vuelos de alquiler que partieron de Haití —y que se cree transportaron hasta unos 31.000 migrantes— aterrizaron en Nicaragua.
La cifra de migrantes representa casi el 60% del total de las llegadas de haitianos a la frontera sur de Estados Unidos, según cifras ofrecidas por Manuel Orozco, director del programa de migración, remesas y desarrollo de Diálogo Interamericano, un centro de investigación en Washington.
Los expertos aseguran que el costo de un asiento en un vuelo chárter a Nicaragua va de los 3.000 a los 5.000 dólares.
Un fenómeno similar ha venido ocurriendo desde 2022 con aerolíneas que realizan vuelos de alquiler a Nicaragua para miles de cubanos que quieren abandonar la isla y que compran boletos aéreos con tarifas altísimas. Muchos de ellos siguen luego el viaje por tierra hacia el norte, cruzando Honduras, Guatemala y México hasta llegar a la frontera con Estados Unidos.
Las medidas anunciadas el martes habían sido advertidas por Brian Nichols, subsecretario de Estado para Asuntos del hemisferio occidental, quien a inicios de noviembre se declaró “preocupado por el aumento dramático en vuelos chárter con destino a Nicaragua”.
“Nadie debería beneficiarse de la desesperación de los migrantes vulnerables, ni los contrabandistas, ni empresas privadas, ni funcionarios públicos, ni gobiernos. Estamos explorando toda la gama de posibles consecuencias para quienes facilitan esta forma de migración irregular”, dijo entonces Nichols en su cuenta de X.
El gobierno de Haití prohibió el pasado 31 de octubre todos los vuelos chárter a Nicaragua, impidiendo así el traslado de miles de haitianos que huyen de la pobreza y la violencia en ese país caribeño.
