MADRID, 22 (EUROPA PRESS)
El parón de selecciones de nueve días ha hecho estragos en la Primera División española, que ha sufrido la virulencia de un 'virus FIFA' que obligará a muchos jugadores a parar dada la relevancia de sus lesiones, algunos de ellos ya despidiéndose incluso de este 2023. El caso más claro y doloroso es el de Gavi, que se pierde toda la temporada y, salvo un improbable recorte de los 8 meses previstos de recuperación, la Eurocopa y los Juegos Olímpicos del próximo verano.
Pero esta no es la única mala noticia en 'Can Barça', ya que, aunque de menor gravedad, también es duda para el regreso de LaLiga EA Sports el guardameta alemán Marc-André Ter Stegen. El portero del FC Barcelona terminó el viernes su concentración con 'Die Mannschaft' por unos fuertes dolores de espalda. Ausente en los duelos internacionales ante Turquía y Austria, el meta siguió su recuperación en la Ciudad Condal, con el partido ante el Rayo Vallecano este sábado.
Tampoco se ha salvado de este 'virus FIFA' el Real Madrid, al que afecta aún más por la plaga de lesiones que acumulaba antes de este parón. Y es que las lesiones del brasileño Vinícius Júnior y el francés Eduardo Camavinga terminaron por agotar las opciones de Carlo Ancelotti para elegir su once, obligado a tirar de la cantera blanca para continuar con la política de rotaciones de aquí a final de año.
El delantero madridista sufrió una rotura en el bíceps femoral con afectación del tendón distal de la pierna izquierda el jueves durante la primera parte del partido entre Colombia y Brasil de las Eliminatorias Sudamericanas para el Mundial de 2026.
Un problema físico que le tendrá según las informaciones dos meses y medio alejado de los terrenos de juego, tiempo de baja similar al que tendrá que enfrentarse el mediocentro galo por una rotura del ligamento lateral externo en la rodilla derecha, debido a un golpe fortuito en un entrenamiento con Francia el miércoles con el jugador del PSG Ousmane Dembélé, y que, como para 'Vini', pone en peligro su participación en la Supercopa de España en Arabia Saudí del 10 al 14 de enero de 2024.
Tampoco podrá contar con una de sus grandes estrellas y pilar fundamental la Real Sociedad, después de la lesión de Mikel Oyarzabal. El atacante 'txuri urdin' abandonó la concentración de la selección española por un problema muscular en el bíceps femoral izquierdo justo antes del descanso del Chipre-España del pasado jueves. Esto podría tener en el dique seco al extremo unas cuatro semanas y dejarle sin jugar ya hasta 2024.
Más trascendente aún es la baja de Vedat Muriqi para el Mallorca, que recibirá al kosovar con una rotura en el gemelo izquierdo producida en el Kosovo-Israel de clasificación para la Eurocopa, que además obligó a posponer un Mallorca-Cádiz en LaLiga para que el equipo bermellón pudiera contar con el ariete, ahora lesionado y con problemas para acabar el 2023 jugando. Y en el Villarreal, el central argelino Aissa Mandi volverá tocado en el tobillo por una acción en el Argelia-Mozambique.
Un parón cuyas consecuencias físicas también van más allá de las fronteras de LaLiga. Y es que el Manchester City, que ya contaba con los lesionados Nunes, Aké, Ederson y Kovacic, podría perder al letal Erling Haaland. El delantero recibió un fuerte golpe en el pie y tuvo que abandonar la concentración de Noruega, con el duelo ante el Liverpool este fin de semana. Otros casos son los del guardameta del Manchester United André Onana, o el centrocampista francés del PSG Warren Zaïre-Emery.
Una catarata de lesiones, algunas de ellas de gravedad y con tiempos de recuperación muy extensos, que vuelven a poner en el foco las ventanas internacionales -tres en los últimos tres meses de competición-, dentro de temporadas de clubes ya saturadas de partidos.
