BRUSELAS, 22 (EUROPA PRESS)
En una carta, a la que ha tenido acceso Europa Press, dirigida al presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, el dirigente húngaro pone en duda que la estrategia europea ante la invasión rusa de Ucrania esté funcionando a la vista del estancamiento en el campo de batalla y los escasos logros de la contraofensiva del Ejército ucraniano para retomar territorio ocupado.
Hungría asegura que hasta que no tenga lugar el debate estratégico sobre la viabilidad de mantener la actual política hacia Ucrania, el Consejo Europeo "no está en posición de adoptar medidas clave" tales como los compromisos de seguridad, el apoyo financiero de 50.000 euros hasta 2027, una nueva ronda de sanciones europeas contra Moscú o "acordar el futuro del proceso de adhesión".
La próxima cumbre de jefes de Estado y de Gobierno en Bruselas está llamada a marcar los próximos pasos en la adhesión de Ucrania a la UE, con el informe favorable de la Comisión Europea para abrir negociaciones de acceso ya en 2024, así como a acordar un plan de apoyo financiero a largo plazo.
Según Orbán la evolución de la guerra en Ucrania así como "el contexto global económico, político y de seguridad obliga a abrir un periodo de reflexión y un potencial reajuste de nuestros objetivos e instrumentos".
A su juicio hay que evaluar la efectividad de la política de apoyo a Ucrania y las sanciones contra Rusia y el impacto en las economías europeas, así como revisar el volumen de ayuda militar y económica así como su "impacto" y "soluciones ante retos en este proceso como la corrupción sistemática extendida" en Ucrania.
Orbán se pregunta en su misiva si la estrategia de la UE tiene futuro a la vista de un posible cambio en la Casa Blanca. "¿Es esta estrategia sostenible sin el apoyo robusto de Estados Unidos? ¿Podemos darlo por asegurado?", se cuestiona el líder más veterano del Consejo Europeo.
Respecto a la entrada de Ucrania en la UE, una cuestión que Budapest viene amenazando con vetar alegando abusos contra la minoría húngara en la región ucraniana de Transcarpatia, el primer ministro húngaro llama a "conciliar" las "ambiciosas" aspiraciones comunitarias de Kiev con los "intereses estratégicos" europeos y la "realidad política y económica" de la UE y Ucrania.
Bruselas mantiene bloqueados más de 20.000 millones de euros en fondos de cohesión comunitarios a Budapest, además de casi 6.000 millones pertenecientes al fondo de recuperación. El Ejecutivo europeo pide que el Gobierno húngaro garantice el respeto a la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea en la aplicación de los fondos, así como reclama reformas para garantizar la independencia judicial y reforzar la lucha contra la corrupción en el marco de los fondos de recuperación.
Hungría ya mantuvo una posición similar el año pasado cuando bloqueó la ayuda de 18.000 millones de euros para Ucrania hasta la cumbre de diciembre, escenario en el que logró que los líderes de los Veintisiete redujeran parte de los fondos congelados por Bruselas.
Fuentes diplomáticas ven esta maniobra como el primer movimiento de "una partida de ajedrez" de cara a la cita de jefes de Estado y de Gobierno, si bien esperan que se logre resolver el conflicto con Hungría pese a que la actitud de Orbán "hace todo difícil".
Otras delegaciones consultadas señalan que esta misiva forma parte del "juego habitual" de Hungría e insisten en que no se trata realmente de la eficacia de la política de la UE hacia Ucrania, sino de una acción "para ver qué pueden conseguir a cambio".