ISLAMABAD, 22 (DPA/EP)
El ministro de Información de la provincia paquistaní de Baluchistán, Jan Achakzai, ha advertido a los refugiados afganos que deberán salir del país antes de enero de 2024, cuando se cumple un mes del decreto del Gobierno central que instaba a todos los migrantes en situación irregular a abandonar el territorio.
"Todos los refugiados tendrán que abandonar Pakistán porque la guerra civil en Afganistán ha terminado", ha zanjado Achakzai, quien ha asegurado que el gobierno interino hará todo lo posible por deportar a todas estas personas antes de enero.
De acuerdo con los datos del Gobierno paquistaní, alrededor de 4,4 millones de refugiados afganos viven en Pakistán, de los cuales se encuentran en situación irregular 1,7 millones de ellos. Si bien muchos de ellos salir de Afganistán huyendo de décadas de guerra, otros tantos son hijos de estas personas desplazadas.
Achakzai ha contado que las autoridades han decido acelerar la segunda fase de estas deportaciones, después de que se haya ralentizado recientemente la primera parte del proceso. En esta ocasión, las fuerzas del orden detendrán a los refugiados para acelerar su expulsión.
Pakistán anunció el mes pasado un plan para salida de todas estas personas, una medida criticada internacionalmente por gobiernos y organizaciones de Derechos Humanos. Hasta la fecha, unos 351.000 afganos han abandonado el país.
Se considera que la medida de Islamabad podría servir para presionar al gobierno de los talibán en Afganistán para que actúen contra los talibán paquistaníes, responsables de varios ataques en la frontera que ambos países comparten.
No obstante, organizaciones de Derechos Humanos han alertado del carácter racista de una ley que señala directamente a los refugiados afganos como responsables de la situación económica y social del país.