BUENOS AIRES (AP) — Representantes legales de la actual dirigencia de Boca Juniors y de la oposición no llegaron a un acuerdo en una audiencia de conciliación convocada este jueves por la justicia para dirimir la controversia por supuestas irregularidades en el padrón de socios, por lo que se mantiene la suspensión de las elecciones previstas para el próximo domingo.
“Están entorpeciendo el acto, queríamos una fiesta con nuestros socios el domingo”, dijo a periodistas Ricardo Rosica, secretario general de Boca al retirarse de la sede de los tribunales de justicia en la ciudad de Buenos Aires.
A principios de esta semana, un juzgado civil de primera instancia dictó una medida cautelar que suspendió las elecciones a partir de una demanda impulsada por la fórmula opositora encabezada por Andrés Ibarra y el expresidente del club Mauricio Macri (1995-2007), quienes iban a competir contra el binomio conformado por el ídolo Juan Román Riquelme, exjugador y actual vicepresidente de la institución, y Jorge Amor Ameal, que está cargo de la presidencia.
La lista opositora denunció presuntas irregularidades en la inscripción de 13.000 nuevos socios durante la gestión liderada por Amor Ameal y reclama que se les dé de baja, de manera que no voten. Boca niega la acusación.
Este jueves, la jueza civil Alejandra Abrevaya convocó a las partes a una audiencia de conciliación en busca de un acuerdo. Como no prosperó, sigue vigente la medida cautelar que suspendió las elecciones.
El futuro político del popular club ahora es una incógnita. Boca apelará la resolución judicial ante una corte de apelaciones, que no se expedirá antes del domingo.
Si la corte le da la razón a la oposición, la justicia iniciará una investigación del padrón de socios que puede llevar varias semanas. Y en enero hay feriado judicial por el receso de verano.
Esto significa que Boca podría iniciar la temporada 2024 sin renovación de autoridades y la amenaza latente de una intervención de la Inspección General de Justicia.
Macri, quien a su vez fue presidente de Argentina entre 2015 y 2019, acusó a la conducción de Riquelme, ídolo histórico del equipo Xeneize y con quien tiene una relación ríspida de años, de haber promovido la asociación automática de unas 13.000 personas, saltándose una larga lista de espera. Por lo que consideró que bajo estas condiciones la votación sería fraudulenta.
Boca respondió en un comunicado que “ha hecho todo regularmente y de acuerdo al estatuto del club” y señaló que la oposición no quiere elecciones el domingo “porque sabe que pierden”.
Riquelme se enfrenta a las elecciones para la renovación de cargos en medio de la desazón por la derrota en la final de la Copa Libertadores ante Fluminense de Brasil el pasado 4 de noviembre. A ello se suma que el equipo no se clasificó a la edición 2024 del certamen continental debido a que no sumó durante la temporada la suficiente cantidad de puntos para acceder a alguno de los seis cupos disponibles.
El club boquense disputará la Copa Sudamericana.