MOGADISCIO, Somalia (AP) — El presidente de Somalia, Hassan Sheikh Mohamud, acogió el sábado la votación del Consejo de Seguridad de la ONU para retirar un embargo de armas impuesto a la nación del Cuerno de África hace más de 30 años.
Los 15 países miembros del Consejo votaron unánimemente el viernes por la noche a favor de la resolución redactada por Gran Bretaña para retirar la prohibición de armas. Sin embargo, Francia fue el único miembro que se abstuvo en la votación de otra resolución para reimponer un embargo de armas a los militantes de Al Shabab, vinculados a Al Qaeda, alegando que la resolución carecía de referencias a las disputas territoriales entre Yibuti y Eritrea.
En un comunicado enviado a The Associated Press, el ministro de Información, Daud Aweis, afirmó que el retiro del embargo ayudará a modernizar las fuerzas armadas del país. “Somalia ha estado lidiando con importantes retos de seguridad, incluida la presencia de grupos extremistas como Al Shabab. El gobierno somalí necesita acceso a armas y equipos modernos para combatir eficazmente estas amenazas y mantener la seguridad dentro de sus fronteras”, señala el comunicado.
El presidente somalí, en un discurso televisado poco después de la adopción de la resolución, afirmó que el levantamiento del embargo “significa que ahora somos libres de comprar cualquier arma que necesitemos”, y añadió que “las naciones amigas y los aliados” pueden ahora “proporcionarnos las armas necesarias sin limitaciones ni restricciones”.
Somalia fue sometida al embargo en 1992 para detener la venta de armas a los jefes militares que derrocaron al antiguo dictador Mohamed Siad Barre. El derrocamiento provocó décadas de guerra civil e inestabilidad en el país, ya que los jefes militares luchaban entre sí.
El mes pasado, Mohamud se comprometió a acabar con el grupo islamista Al Shabab antes de diciembre de 2024. El grupo miliciano ha perdido franjas de territorio desde que el gobierno, respaldado por milicias locales, tropas de la Unión Africana y potencias occidentales, lanzó una amplia ofensiva contra él en mayo.
Somalia se ha visto asolada por años de conflicto y durante décadas ha dependido en gran medida del apoyo de las fuerzas de la Unión Africana, así como de potencias occidentales como Estados Unidos y Turquía, para mantener la seguridad y contrarrestar la amenaza que suponen los grupos militantes islámicos que operan en el país.