El Papa Francisco lamentó este domingo la ruptura de la tregua entre Israel y Hamás y urgió un nuevo acuerdo de alto el fuego “lo antes posible”.
“Nos duele que se haya roto la tregua: esto significa muerte, destrucción, miseria”, ha alertado tras el rezo del Ángelus, que se ha realizado por segundo domingo consecutivo desde la Casa de Santa Marta, residencia del Papa, al encontrarse este recuperándose aún de una inflamación pulmonar. En concreto, monseñor Paolo Braida ha leído el texto en nombre del Pontífice.
Francisco ha subrayado que a pesar de que muchos rehenes han sido liberados en la ya finalizada tregua, “muchos siguen en Gaza”, y ha advertido asimismo del sufrimiento en el enclave, donde “faltan productos de primera necesidad”.
“Espero que todos los implicados puedan alcanzar un nuevo acuerdo de alto el fuego lo antes posible y encontrar soluciones distintas a las armas, tratando de tomar caminos valientes hacia la paz”, ha reclamado.
Por otro lado, el Papa ha mostrado su apoyo a las víctimas del atentado de este domingo en una misa en una universidad de la isla-estado filipino de Mindanao y ha precisado que sigue con “gran atención” lo que ocurre en la Cumbre de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP28), que se celebra en Dubái.
En este sentido, ha llamado a “responder al cambio climático con cambios políticos concretos”. “Salgamos de las estrecheces del particularismo y del nacionalismo, patrones del pasado, y abracemos una visión común, comprometiéndonos todos ahora, sin demora, en una necesaria conversión ecológica global”, ha señalado.
Asimismo, con motivo del Día Internacional de las Personas con Discapacidad, que se celebra este domingo, ha animado a “acoger e incluir a quienes viven esta condición”, lo que “ayuda a toda la sociedad a ser más humana”. “En las familias, en las parroquias, en las escuelas, en el trabajo, en el deporte: aprendamos a valorar a cada persona con sus cualidades y capacidades, y no excluyamos a nadie”, ha sentenciado.