WASHINGTON (AP) — Hunter Biden fue acusado formalmente el jueves de nueve cargos de evasión fiscal en California, mientras se intensifica la investigación de un fiscal especial sobre los negocios del hijo del presidente, con las próximas elecciones de 2024 como telón de fondo.
Los nuevos cargos —tres delitos graves y seis menores— se suman a los cargos federales por tenencia de armas en Delaware que aseguran que en 2018 Hunter Biden violó una ley que prohíbe que los consumidores de drogas posean armas.
Hunter Biden “gastó millones de dólares en un estilo de vida extravagante en lugar de pagar sus impuestos”, dijo el fiscal especial David Weiss en un comunicado. Los cargos se centran en al menos 1,4 millones de dólares en impuestos que adeudó entre 2016 y 2019, un periodo en el que ha reconocido haber luchado contra la adicción.
De ser declarado culpable, Hunter Biden podría ser sentenciado a hasta 17 años de prisión. La investigación del fiscal especial sigue abierta, dijo Weiss.
Se esperaba que Hunter Biden se declarara culpable de cargos fiscales menores como parte de un acuerdo con la fiscalía. Los abogados defensores han señalado que planean luchar contra cualquier nuevo cargo, aunque no respondieron de momento a mensajes en busca de comentarios el jueves.
La Casa Blanca tampoco quiso hacer comentarios sobre la acusación del jueves, y remitió las preguntas al Departamento de Justicia o a los representantes personales de Hunter Biden.
El acuerdo, que cubría los años fiscales 2017 y 2018, se vino abajo en julio, después de que un juez expresara sus dudas al respecto. También había sido calificado como un “acuerdo indulgente” por parte de los republicanos que investigan casi todos los aspectos de los negocios de Hunter Biden y el manejo del caso por parte del Departamento de Justicia.
Los legisladores republicanos también han intentado iniciar una investigación de juicio político contra el presidente Joe Biden, asegurando que ha participado en un complot de tráfico de influencias con su hijo. La cámara baja tiene previsto votar la próxima semana sobre la autorización formal de la pesquisa.
Aunque han surgido preguntas éticas en torno a los negocios internacionales de la familia Biden, hasta el momento no se ha presentado evidencia que muestre que Joe Biden, en su cargo actual o previo, abusó de su autoridad o aceptó sobornos.
La investigación penal encabezada por el fiscal federal de Delaware David Weiss ha estado abierta desde 2018, y se presumía que sería desestimada con el acuerdo de culpabilidad que Hunter Biden planeaba concretar con la fiscalía a mediados del año. El hijo del presidente se habría declarado culpable de dos cargos menores de evasión fiscal y hubiera presentado un acuerdo por separado sobre el cargo de armas de fuego. Habría tenido que cumplir con dos años de libertad condicional en lugar de pasar tiempo en prisión.