Con todo lo que ha logrado Bill Belichick en poco más de dos décadas en Nueva Inglaterra, nunca antes había conseguido esto.
El seis veces campeón de Super Bowl, uno de los coaches más grandes en la historia de la NFL, hizo que sus jugadores se unieran a su defensa en un intento de terminar con una racha de cinco derrotas e incluso puede que hayan salvado su trabajo.
“Me siento bien de que lo conseguimos por Bill y el resto de los entrenadores”, dijo el safety Jabrill Peppers a ESPN después de la victoria por 21-18 sobre los Steelers de Pittsburgh el jueves por la noche. “Realmente no me gustan las críticas que ha recibido, porque somos nosotros los jugadores los que salimos y ejecutamos”.
Los Patriots (3-10) anotaron tres touchdowns en la primera mitad, los mismos que tuvieron en los cuatro partidos previos combinados, y resistieron para conseguir su primera victoria desde la semana 7. En su segunda apertura desde que Mac Jones fue mandado a la banca, Bailey Zappe logró una marca en su carrera con tres anotaciones, completando 19 de 28 pases para 240 yardas.
Belichick, de 71 años, ha guiado a los Patriots a seis campeonatos de la NFL desde que llegó a Nueva Inglaterra en 2000, junto con otros tres campeonatos de conferencia y 17 títulos de la división Este de la AFC en 19 temporadas para una de las dinastías más grandes de la liga en la era del Super Bowl. Ha ganado 332 partidos (incluidos los playoffs), y ocupa la segunda posición en la lista histórica de la NFL, detrás de Don Shula.
Pero la persecución de Belichick al legendario head coach de Miami se ha estancado con los Patriots tocando fondo en la tabla de posiciones de la AFC, y parece que tratará de dar alcance a Shula con otro equipo la próxima temporada.
“Obviamente, hay un sentimiento de frustración con la temporada en general. Pero, viendo las cosas semana a semana, uno como que pone de lado eso y se concentra en la semana que corresponde”, aseguró.
QUÉ FUNCIONA
La ofensiva cobró vida después de anotar un total de 13 puntos en los tres partidos previos, incluida una derrota por 6-0 ante los Chargers de Los Ángeles el domingo, en la que ni siquiera llegaron a la zona roja. Hunter Henry tuvo un par de recepciones de anotación, incluida una acrobática que puso el partido 21-3 a mediados del segundo periodo. Ezekiel Elliott corrió para 68 yardas y, además, atrapó siete pases para 72 yardas.
QUÉ DEBE MEJORAR
Los equipos especiales una vez más fueron un problema, con una patada de despeje bloqueada que dejó a los Steelers a tiro para recortar la diferencia con un touchdown que puso el juego 21-18 con 11 minutos por jugar. También hubo un castigo con Pittsburgh alineado para patear con un aparente falso arranque que le hubiera significado un primer down a los Steelers, que inexplicablemente se marcó como falso arranque de la ofensiva.
