El secretario de Defensa, Lloyd Austin, tiene cáncer de próstata y su reciente hospitalización secreta fue para una cirugía y luego para tratar una infección del tracto urinario relacionada con esa operación, dijeron los médicos el martes.
Austin, de 70 años, ingresó al Centro Médico Militar Nacional Walter Reed el 22 de diciembre y se sometió a una cirugía para tratar el cáncer. Austin desarrolló la infección una semana después.
Durante días no se informó a la Casa Blanca ni a altos funcionarios del Pentágono sobre su hospitalización o su cáncer. Como consecuencia, el jefe de despacho de la Casa Blanca ordenó el martes a todos los miembros del gabinete a notificarle si en algún momento están incapacitados de ejercer sus funciones.
Jeff Zients, en un memorándum a los integrantes del gabinete, giró instrucciones de que le entreguen a la Casa Blanca antes del viernes su protocolo para delegar autoridad en caso de incapacitación o pérdida de comunicación.
Mientras continúa la revisión de los procedimientos, Zients le ha pedido a todas las agencias del gobierno que le notifiquen a su despacho o a la oficina de asuntos de gabinete de la Casa Blanca si alguna de ella experimenta o planea experimentar una circunstancia en que el director no puede ejercer sus funciones.
El memorándum surge tras revelaciones de que el presidente Joe Biden y otros altos funcionarios estuvieron días sin enterarse de que Austin había sido hospitalizado y había delegado funciones a su subalterno. Un vocero del Pentágono atribuyó el hecho a que la persona encargada tenía gripe.