Un médico mexicano y una polaca fueron secuestrados el pasado 10 de febrero en Chad, país africano que atraviesa por una tensión política que eleva la violencia en las calles. Los raptores irrumpieron en un hospital católico de la localidad de Dono Manga donde trabajaban los dos médicos.
Las autoridades chadianas identificaron al médico mexicano como Juan Carlos Salgado de 54 años y la doctora polaca, de 28 años, se llama Aleksandra Kuligowska.
“El mexicano consiguió escapar el mismo día de su secuestro en medio de un combate entre el Ejército chadiano y los secuestradores, que abandonaron a los rehenes en su fuga”, compartió a la agencia EFE el comandante en jefe de las operación de rescate, Saleh Mohamed.
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El Ejército quiso luchar contra los secuestradores y estallaron nuevos enfrentamientos entre ambos bandos a primera hora de este jueves. En total hubo diecisiete muertos, incluidos quince atacantes de la vecina República Centroafricana, agregó Mohamed.
Por su parte, el ministro chadiano de Seguridad, Mahamat Charfadine Margui, declaró a la agencia internacional que “se harán esfuerzos para garantizar la seguridad de los residentes” en la zona.
Contexto de la actualidad en la República del Chad
Los secuestros realizados por hombres armados son un fenómeno común en una región al sur de Chad, país que hace frontera con Camerún y la República Centroafricana.
De acuerdo con información recabada, los atacantes asaltan de noche pueblos y ciudades, antes de llevar a sus víctimas a los países vecinos para exigir dinero para el rescate de quienes secuestraron.
En el país existen más de una docena de grupos rebeldes que dicen luchar contra las autoridades locales.
El autoritario presidente Idriss Déby Itno dirigía Chad desde 1991 pero murió durante enfrentamientos entre el Ejército chadiano en abril de 2021. El grupo rebelde Frente para la Alternancia y la Concordia Nacional en Chad (FACT, en francés) fue quien se atribuyó este delito.
