Avanzaba la noche del 8 de abril del presente año cuando cuatro sujetos intentaron despojar de su vehículo a un adulto mayor en Zacatelco, Tlaxcala. Al poner resistencia al asalto, los delincuentes privaron de la vida al taxista y emprendieron la huida pero fueron alcanzados a los pocos metros.
Vecinos del barrio Xitototla corrieron por la calle Veracruz para dar alcance a los asaltantes de cuales logran capturar a dos y la otra mitad logró escapar. Cegados por la furia de presenciar el asalto, los colonos golpearon a los involucrados y descubrieron que uno de ellos es Bernabé N., integrante del equipo jurídico de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
El segundo involucrado en la salvaje golpiza callejera es el director de la Policía de Investigación de la Procuraduría General de Justicia del Estado de apellido Portillo, de acuerdo con información compartida por el diario de Tlaxcala.
Policías intervienen con bombas y balas
Minutos más tarde, un fuerte operativo policiaco arribó al lugar para intentar contener a la furiosa masa e intervinieron con bombas de gas lacrimógeno y algunos disparos con armas de fuego.
Los uniformados intentaron rescatar a los dos elementos que eran custodiados por los pobladores, mismos que les propinaron una fuerte golpiza con diversos objetos que tenían a la mano, como lo relata Milenio.
El jefe de la PGJE fue rescatado pero Bernabé no corrió con la misma suerte, pues estaba tirado e inconsciente en el suelo tras la paliza recibida. Minutos antes de las 23:00 horas el integrante de la SSC ingresó al hospital “Lic. Anselmo Cervantes Hernández”, donde perdió la vida.
Población harta de la corrupción
La operación de rescate se complicaba cada vez más debido a la adición de más pobladores que se acercaron al lugar tras escuchar el llamado de las campanas de una iglesia.
Esta situación complicó la labor de los policías que intentaban rescatar al elemento restante y pedir a la gente aglomerada que permitieran el ingreso de los peritos para levantar el cuerpo del taxista fallecido, situación que no ocurrió hasta mucho después.
La población también amagó con voltear e incendiar patrullas pero los mismo policías pidieron apoyo a más elementos de otros municipios y gracias a ello, lograron evitar este acto vandálico.