Tras el debate entre los candidatos al gobierno de Veracruz, los señalamientos a la morenista Rocío Nahle se dispararon, en especial por el tema de la declaración de bienes. Pero ella no es la única, en Jalisco también exigen a su compañera de partido, Claudia Delgadillo, transparentar sus recursos no solo porque la ley lo exige, sino como un principio de integridad, tal y como ha promovido el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Bajo los principios de la 4T, este compromiso es esencial para cambiar el destino de México; sin embargo, las acciones de Nahle y Delgadillo han sembrado dudas sobre su compromiso con la austeridad republicana.
Rocío Nahle, candidata a la gubernatura de Veracruz por la coalición ‘Sigamos haciendo historia’, —conformada por Morena, PVEM y PT— y Claudia Delgadillo, aspirante en Jalisco por la misma corriente política, han sido criticadas por no transparentar adecuadamente el manejo financiero de sus gestiones anteriores como servidoras públicas. Esta situación ha impactado negativamente sus campañas, poniendo en duda la integridad de sus procesos democráticos.
La transparencia en el financiamiento de las campañas es crucial para que los ciudadanos sepan el origen de los recursos utilizados en la promoción de los candidatos, evitando conflictos de interés y corrupción. Ambas candidatas han sido señaladas por ocultar información en sus declaraciones patrimoniales.
