El diputado federal Rubén Moreira Valdez, coordinador del grupo parlamentario del PRI, calificó la Reforma Judicial aprobada por los diputados de Morena como un “engaño”, argumentando que no mejorará el sistema de justicia ni incrementará la cantidad de jueces para agilizar la resolución de casos.
Durante su programa “Con Peras, Manzanas y Naranjas”, Moreira instó a los senadores a votar en contra de la iniciativa y defender a México.
El legislador criticó que la reforma no contempla un aumento en el presupuesto para el sector judicial, ni la creación de más juzgados, ni el fortalecimiento de las defensorías de oficio y fiscalías, además de no garantizar mayor seguridad. Señaló que esto pone en riesgo la impartición de justicia, la democracia y la independencia entre los Poderes de la Unión.
Reforma del PJ es centralista
Acompañado por el economista Mario Di Costanzo y el abogado Miguel Ángel Sulub, Moreira subrayó que la reforma no resolverá los problemas de seguridad, y advirtió que sin más jueces, el sistema de justicia penal no podrá responder a la creciente criminalidad.
También afirmó que es falso que la ciudadanía elegirá directamente a jueces, magistrados o ministros. Según Moreira, Morena y los gobiernos afines impondrán una lista de candidatos afines a sus intereses, lo que, a su juicio, elimina la imparcialidad en la selección.
Los analistas invitados al programa compararon la reforma con la Constitución centralista promovida por el dictador Antonio López de Santa Anna en 1843. Indicaron que Morena busca eliminar el sistema federal, la protección de derechos humanos y la presunción de inocencia.
Moreira también rechazó que países como Bolivia o Estados Unidos sirvan como ejemplo para el modelo propuesto. En Bolivia, según el diputado, el sistema judicial está en crisis con jueces en paro, y en Estados Unidos los jueces de la Corte Suprema son seleccionados por el Senado.
Por último, hizo un llamado a los estudiantes de Derecho y a los jueces locales para que se movilicen y defiendan su profesión, asegurando que los cambios constitucionales afectarán a los estados de la federación. Expresó su confianza en que los senadores de oposición votarán en contra de la reforma, evitando lo que consideró la “destrucción de México y el sistema de derechos humanos”.