En la sierra de Vilcabamba, un equipo arqueológico hispanoperuano descubrió un centro minero inca y español de los siglos XVI y XVII. El hallazgo podría reescribir parte de la historia minera y colonial del Perú.El director de la expedición, el español Miguel Gutiérrez Garitano, cree que las ruinas halladas "podrían ser los restos de las poblaciones –inca y española respectivamente- de Oncoy y la Villa Rica de Argete"
Los restos arqueológicos se encontraron en el monte Comballa, que sería el histórico cerro platífero de Guamani y Guamanapi, de gran importancia en la historia de la región, según señaló un comunicado de la Sociedad Geográfica Española, organizadora de la expedición.
Hallazgos podrían reescribir parte de la historia minera y colonial del Perú
Además de las minas, el equipo encontró restos de caminos incas, vestigios religiosos y estructuras que podrían probar la importancia espiritual del cerro Comballa como montaña sagrada o apu.
Los trabajos también abarcaron el valle de Ushnuyoc, donde se hallaron fortalezas, cementerios y poblaciones preincaicas. La investigación sigue en curso y podría reescribir parte de la historia minera y colonial del Perú.
Dos áreas de exploración arqueológica
Los trabajos del equipo español se han centrado en dos áreas remotas de los Andes de entre 3.000 y 4.700 metros de altitud.
Por un lado, en un cerro de 4.700 metros de altura situado al suroeste de la actual población de Vilcabamba, que está rodeado de otros montes como el San Cristóbal o el San Lorenzo, con los que conforma los valles de Huamanapi al este, Minaspata al Norte y Chalcha al oeste.
Es en esa área, en el monte Comballa y en un paraje cercano a la cima, conocido como Huayna Huarco, en el que se han hallado las posibles minas de plata explotadas por incas y españoles; la ciudad incaica de Oncoy; evidencias de poblaciones mineras incas y españolas; un tramo de carretera inca y del paraje de humillación de los frailes y pruebas que demostrarían que el Comballa fue un apu (montaña sagrada) andino.
La segunda zona de trabajo se ha situado en el valle de Ushnuyoc, un paso de montaña que se extiende en la vertiente occidental sobre el valle del río Quishuarpampa, a lo largo de un camino que une los valles de Vilcabama y Panpaconas con el río Apurimac vía Patibamba.
Ahí se encontraron restos del poblado fortificado de Chungi Loma, la necrópolis de Quishuarpampa y núcleos de población pertenecientes al Período Intermedio Tardío, que va desde el año 1000 al 1450.
Podrían estar "ante un descubrimiento extraordinario"
Los trabajos siguen en curso y el equipo trabaja con la hipótesis de que estarían "ante un descubrimiento extraordinario, por haber sido este centro minero, la capital administrativa de la Vilcabamba española durante siglos".
Además, durante los últimos años del siglo XVI, esta fue una mina de importancia de donde salía el mineral machacado a las fundiciones de Cuzco y Lima, desde donde partía después a España, México y China.
rml (efe, andina)