Tras protesta e intercambio de declaraciones, encuentro entre la activista Ceci Flores, fundadora del colectivo Madres Buscadoras de Sonora, y la presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Rosario Piedra Ibarra, derivó en el acuerdo para establecer una mesa de trabajo con familias víctimas de desaparición y colectivos.
Este martes, Flores ingresó junto con otras mujeres al edificio de la CNDH luego de denunciar que se les había impedido el acceso. La activista explicó que su presencia buscaba exigir una audiencia pública y visibilizar la falta de respuesta institucional ante los casos de desaparición. Como acto simbólico, entregó una pala a Piedra Ibarra, solicitando que este objeto le recordara el sufrimiento de las madres que buscan a sus hijos.
“Le regalamos la pala y le pedimos que cada que vaya a tomar una decisión que afecte a la víctimas, piense en su historia, para que esa pala le recuerde el dolor por el que luchó su madre y ahora nos toca luchar a nosotras”, escribió Flores en su cuenta oficial de X.
Tras el encuentro, la madre buscadora aseguró que Piedra Ibarra se comprometió a abrir la comisión a víctimas y colectivos que lo soliciten y que la primer mesa de trabajo tendrá lugar el próximo martes. Asimismo, se planteó una revisión de perfiles al interior del organismo que, según las denunciantes, han afectado la labor de la CNDH o han promovido acciones legales contra víctimas.
¿Qué sucedió antes del encuentro?
En sus redes sociales, Ceci Flores aseguró tener pruebas documentales que demostrarían la negativa inicial de acceso. Afirmó que dichas pruebas serán entregadas a la Fiscalía Especializada en Materia de Derechos Humanos de la FGR.
Por su parte, la CNDH negó que se hubiera prohibido el ingreso a la activista. En un comunicado difundido por su cuenta oficial, explicó que Flores llegó anunciando que tomaría el edificio y que, por ello, se activaron los protocolos de seguridad. El organismo sostuvo que su actuación se apegó a medidas preventivas internas.
Flores rechazó dicha versión señalando que aprovecharon un descuido del personal de seguridad para ingresar por una puerta que, en sus palabras, “debería estar abierta al pueblo”.