Por primera vez en la historia de Estados Unidos, una mujer mexicana fue acusada formalmente de brindar apoyo material al “narcoterrorismo” por colaborar con el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), considerado una organización terrorista extranjera desde febrero de este año.
María del Rosario Navarro-Sánchez, de 39 años, enfrenta cargos por entregar granadas al cártel, así como participar en el tráfico de drogas, armas, dinero y personas hacia territorio estadounidense. La Fiscalía asegura que su participación no fue menor: actuó como una operadora clave para el grupo criminal desde México.
Granadas, drogas y migrantes
La acusación fue revelada este viernes por el Departamento de Justicia en Texas, donde se detalló que Navarro-Sánchez no actuaba sola. Dos hombres (Luis Carlos Dávalos-López, de 27 años, y Gustavo Castro-Medina de 28 años) también fueron detenidos por delitos similares, todos relacionados con el respaldo logístico al CJNG, uno de los cárteles más violentos a nivel continental.
Las autoridades señalan que, además del armamento, los acusados facilitaron el cruce ilegal de migrantes y el envío de drogas como metanfetamina y fentanilo, provocando una amenaza directa a la seguridad nacional de Estados Unidos.
Trump declaró guerra total a los cárteles
Desde enero del presente año, el gobierno estadounidense intensificó su lucha frontal contra los cárteles, tras la orden ejecutiva del expresidente Donald Trump que instruyó a sus agencias a desmantelar por completo las organizaciones criminales trasnacionales.
“Nunca permitiremos que pandillas criminales y cárteles aterroricen a las comunidades estadounidenses. Los días de violencia sin control por parte de los cárteles han terminado”, dijo la Secretaria de Seguridad Nacional Kristi Noem.
Con esta acusación, el Departamento de Justicia busca sentar un precedente para juzgar como “narcoterrorismo” las operaciones de los cárteles mexicanos. La detenida fue capturada en México el 4 de mayo y será juzgada bajo cargos que podrían costarle cadena perpetua.