En un giro político con implicaciones familiares, Suany Villar Camacho, hermana de la actual alcaldesa de Xochimilco, Circe Camacho, anunció su renuncia definitiva al Partido del Trabajo (PT) y su adhesión al proyecto de Morena, acompañada por el también exfuncionario Maximino Corrales Ramos.
Ambos acusaron públicamente a la administración de Circe Camacho de haber traicionado los principios que decía defender, y de haber dejado de representar a la ciudadanía xochimilca. “Este Gobierno ha sido indiferente, sordo a las verdaderas necesidades de Xochimilco”, declaró Suany Villar, quien aseguró que no será cómplice de la impunidad y el encubrimiento.

Durante una conferencia de prensa, denunció violencia política y de género por parte de la propia administración encabezada por su hermana, y responsabilizó a Circe Camacho de cualquier acto que pudiera atentar contra su integridad. También criticó que el gabinete esté compuesto por personas ajenas a la comunidad, “impuestas por dedazo, sin compromiso con nuestra tierra”.
“El sello de esta administración es la traición: traición al pueblo, traición a la esperanza de un cambio real”, sentenció Villar Camacho.
Por su parte, Maximino Corrales Ramos lamentó la ruptura de acuerdos y principios: “Este proyecto ya no representa lo que alguna vez defendimos. Este camino continúa, pero ya no dentro del PT”.

Ambos afirmaron que su decisión responde a la necesidad de rescatar Xochimilco desde un espacio que realmente escuche al pueblo, y encontraron ese camino en Morena. La consejera morenista Silvia de la Cueva Soto les dio la bienvenida, asegurando que en ese movimiento se construye con convicción, no por conveniencia.
Con esta decisión, Suany Villar y Maximino Corrales marcan un punto de quiebre político y personal en Xochimilco, y reafirman que su lealtad está con la gente, no con los proyectos de poder que —según ellos— hoy se ejercen para servirse, en lugar de servir.