Una imagen filtrada tras un operativo militar en Sinaloa ha generado fuerte impacto en redes sociales. En ella aparece el cuerpo sin vida de Jorge Humberto Figueroa Benítez, alias “El Perris” o “El 27”, considerado jefe de seguridad de Los Chapitos
Este capo es señalado como el presunto responsable del secuestro del histórico capo Ismael “El Mayo” Zambada, en una acción que habría desatado una violenta fractura al interior del Cártel de Sinaloa.
El asesinato de El Perris en Sinaloa
El Perris o La Perris fue abatido por elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa) durante un enfrentamiento en Sinaloa. De acuerdo con el Secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, las fuerzas federales fueron atacadas por hombres armados durante un operativo para capturarlo, lo que derivó en su muerte tras repeler la agresión en legítima defensa.
La escena del operativo fue captada en una imagen que muestra el cuerpo de Figueroa Benítez recostado sobre una cama, con heridas visibles y un fusil a un costado. Las paredes del cuarto presentan múltiples impactos de bala y rastros de sangre, lo que refleja la crudeza del enfrentamiento.
¿El Perris secuestró a El Mayo?
De acuerdo con el periodista Juan Becerra Acosta, El Perris estuvo vinculado al presunto secuestro de El Mayo Zambada en julio de 2024, una acción sin precedentes que habría buscado entregarlo a Estados Unidos.
Este hecho intensificó la pugna interna en el Cártel de Sinaloa, provocando un enfrentamiento abierto entre Los Chapitos y Los Mayitos, la facción leal al veterano capo. Esta fractura marcó un punto de quiebre dentro del cártel, que aún hoy resiente los efectos del conflicto interno.
De sicario a comandante de los Ninis
Con apenas 36 años, Jorge Humberto Figueroa había ascendido en la estructura criminal tras la captura de Néstor Isidro Pérez Salas, “El Nini”, en noviembre de 2023. Desde entonces, asumió el control de “Los Ninis”, el brazo armado de Los Chapitos, caracterizado por su alto nivel de violencia.
El Departamento de Estado de Estados Unidos lo acusaba de conspiración para el tráfico de fentanilo, uso de armas de alto poder, lavado de dinero y participación en una organización criminal. Incluso ofrecía una recompensa de un millón de dólares por información que condujera a su captura.