Seis elementos del Ejército mexicano murieron y dos más resultaron heridos luego de la explosión de una narcomina durante un operativo en la zona serrana que divide los estados de Michoacán y Jalisco, específicamente en la localidad de El Santuario.
Esta región forma parte del corredor de Tierra Caliente, donde el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) mantiene una intensa disputa con otros grupos criminales, como Los Reyes, por el control territorial.
Según informes preliminares, el convoy militar se desplazaba por un camino de terracería cuando un artefacto explosivo oculto en la vía fue detonado, provocando la muerte inmediata de seis soldados.
Los dos oficiales heridos fueron trasladados en helicóptero a un hospital cercano, donde reciben atención médica especializada, según información de Milenio.
Dos oficiales identificados entre las víctimas
De acuerdo con Uno TV, entre las víctimas se encuentran el segundo subinspector Jovany Rosales y el subagente Jorge Alberto Cruz Velázquez. Sin embargo, hasta el momento, la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa) no ha confirmado oficialmente la identidad del resto de los elementos caídos.
La explosión ocurrió mientras los militares intentaban desmantelar un centro de operaciones y adiestramiento del CJNG. Esta célula criminal ha incrementado el uso de minas terrestres como parte de su estrategia para obstaculizar el avance de las fuerzas de seguridad y contener a grupos rivales.
Narcominas, una amenaza creciente en Tierra Caliente
Las narcominas —artefactos de fabricación casera altamente letales— se han convertido en una amenaza recurrente en esta región del país. En las zonas de Tierra Caliente que abarcan partes de Michoacán y Jalisco, el CJNG ha intensificado su uso como método para consolidar su dominio territorial.
Tras el ataque, las autoridades iniciaron un operativo de rastreo para dar con los responsables de colocar los explosivos. La zona permanece bajo vigilancia militar y se prevé el refuerzo de la presencia federal en puntos estratégicos.
