La Ciudad de México tipificará como delito tirar basura en la calle a fin de combatir los basureros clandestinos que proliferan en las 16 alcaldías, pues la Bancada de Morena en el Congreso capitalino presentó una iniciativa para que arrojar desechos en lugares no autorizados deje de considerarse sólo una infracción administrativa.
La diputada Elizabeth Mateos propuso incorporar al Código Penal una nueva figura que sancione con prisión de 3 a 6 años y multa de 40 a 120 días a quien arroje, abandone o deposite basura, residuos sólidos, escombros o sustancias contaminantes en la vía pública o espacios no autorizados.
La iniciativa que plantea derogar la fracción IV del artículo 29 de la Ley de Cultura Cívica también busca aumentar la pena hasta 9 años y 500 días de multa a quien organice, consienta o administre tiraderos clandestinos, o utilice vehículos de carga o maquinaria para depositar residuos ilegalmente.
Y es que de acuerdo con datos de la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema), cada día se generan en la Ciudad de México más de 12 mil 700 toneladas de residuos sólidos urbanos, de los cuales cerca de mil 100 toneladas al día terminan en lugares no autorizados.

Indicó que la basura que se abandona en lugares no autorizados, como: calles, parques, barrancas, banquetas, camellones, cuerpos de agua y espacios públicos, provoca drenajes tapados, inundaciones, plagas, fauna nociva, enfermedades, contaminación visual y ambiental, e incluso afectaciones a la movilidad y la seguridad, especialmente en zonas de alta vulnerabilidad.
“La presencia de basura en el espacio público sigue siendo un reto, sí, pero también una oportunidad para que la ley acompañe con mayor firmeza los esfuerzos institucionales, comunitarios y ciudadanos que todos los días trabajan por una ciudad más limpia y más digna”.
— Elizabeth Mateos
Afirmó que las sanciones actuales, con multas que en la mayoría de los casos no rebasan los mil pesos, no corresponden a la magnitud de esta problemática, por lo que es necesario fortalecer el marco legal para acompañar los esfuerzos institucionales y comunitarios que se realizan todos los días para mantener limpios los espacios públicos.
“Esta no es una medida punitiva, es una medida responsable. Es un llamado a proteger la salud pública, el medio ambiente y la calidad de vida de quienes habitamos esta ciudad”.
— Elizabeth Mateos