El Segundo Tribunal Colegiado del Décimo Noveno Circuito, con sede en Reynosa, Tamaulipas, confirmó la absolución del exalcalde de Iguala, Guerrero, José Luis Abarca Velázquez, en el caso del secuestro de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, desaparecidos entre el 26 y 27 de septiembre de 2014. La resolución fue emitida este 3 de junio y ratifica la sentencia dictada en 2022, la cual ya había sido confirmada en apelación en 2023.
Sin embargo, Abarca no saldrá en libertad, ya que enfrenta otras condenas: una sentencia de 20 años por el homicidio del síndico Justino Carvajal Salgado y otra de 92 años por el secuestro y asesinato de activistas de la Unión Popular Campesina Emiliano Zapata en 2013. Además, continúa procesado por delitos como lavado de dinero y delincuencia organizada.
¿Cómo fue vinculado a los 43 de Ayotzinapa?
La desaparición de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, en septiembre de 2014, generó una crisis de derechos humanos en México. La versión oficial inicial, conocida como la “verdad histórica”, señalaba que los estudiantes fueron entregados al grupo criminal Guerreros Unidos por policías municipales, quienes posteriormente los asesinaron y quemaron sus cuerpos en un basurero de Cocula.
En esta narrativa, Abarca y su esposa, María de los Ángeles Pineda Villa, habrían ordenado el ataque para evitar que los normalistas interrumpieran un acto político. Sin embargo, con el tiempo se revelaron irregularidades graves en la investigación, como el uso de tortura y falta de evidencia concluyente, lo que debilitó sustancialmente el caso.
Absolución judicial
El juez federal Samuel Ventura Ramos absolvió a Abarca en 2022 por falta de pruebas suficientes para vincularlo directamente con el secuestro y con Guerreros Unidos. Esta decisión fue ratificada en mayo de 2023 por el Tribunal Colegiado de Apelación del Décimo Noveno Circuito, y ahora fue confirmada definitivamente por el Tribunal Colegiado en Reynosa, que rechazó un amparo presentado por los padres de los normalistas.
El fallo subraya que la Fiscalía General de la República (FGR) no logró probar la existencia de Guerreros Unidos como una organización criminal estructurada ni demostrar la participación de Abarca en los hechos.
