Cambiar de empleo para mejorar tus situación económica o empezar a trabajar por tu cuenta puede ser un gran paso en tu vida, pero también implica riesgos si no aseguras tu salud financiera.
Si cuentas con un seguro de gastos médicos mayores a través de tu empleo actual, existe una forma de conservarlo después de dejar tu trabajo, señalo Grupo KC, empresa especializada en protección financiera.
Reportó que en México, 49 de cada 100 pesos que se gastan en salud provienen directamente del bolsillo de las personas, de acuerdo con datos del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
Destacó que dicha cifra que representa más del doble del promedio de países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), lo que puede convertirse en una carga económica fuerte si no se cuenta con un seguro médico.
¿Qué pasa con tu seguro si renuncias?
El coordinador comercial en Grupo KC, Israel Sánchez Contreras, explicó que si vas a dejar tu empleo —por decisión propia o por causas externas— es posible pasar tu póliza de colectiva a individual.
A través de un informe, el especialista indicó que este proceso se llama derecho de conversión y permite mantener las ventajas que ya tenías como asegurado, con el objetivo de que no quedes desprotegido contra una emergencia médica.
Refirió que, entre los beneficios más importantes de hacer esta conversión están:
- Cobertura de enfermedades preexistentes.
- Conservación de la suma asegurada.
- Protección para tus dependientes: cónyuge e hijos.
Pero hay un detalle clave: el trámite debe realizarse dentro de los primeros 30 días naturales después de tu baja laboral. De lo contrario, se pierden todos estos beneficios.
¿Cómo se hace la conversión?
- El proceso se gestiona con el área de Recursos Humanos, Finanzas o Administración de Riesgos de tu empresa.
- Debes verificar que tu póliza incluya la opción de conversión a individual e iniciar el trámite dentro del plazo de 30 días tras tu salida.
Los documentos que se requieren incluyen:
- Solicitud de cambio y de conversión al seguro de gastos médicos mayores individual.
- Cotización del nuevo plan.
- Identificación oficial y comprobante de domicilio.
- Documento que acredite tu baja, como carta de finiquito, baja del IMSS o carta de jubilación.
“No hay que esperar a quedarse sin protección para actuar. Un seguro de salud es una inversión que puede marcar la diferencia entre la estabilidad financiera y un gasto imprevisto que afecte el patrimonio familiar”.
— Israel Sánchez, Grupo KC
¿Qué cambia en la nueva póliza?
Al convertir tu póliza, las condiciones pueden cambiar. Por ejemplo, las primas pueden ser más altas y las coberturas pueden variar; por eso, es fundamental leer con atención el nuevo contratoy pedir asesoría a un agente de seguros.
De esta forma sabrás exactamente qué estás contratando y si sigue siendo una buena opción para ti y tu familia, concluyó el coordinador comercial en Grupo KC.
