Alemania reconoce que aún le faltan algunos porcentajes para alcanzar a las grandes potencias. El problema: las causas son conocidas desde hace tiempo, pero no se resuelven rápido.Decepcionados y con la cabeza baja, los jugadores se retiraron del campo en el estadio de Stuttgart. Tras la derrota contra Francia en la Liga de Naciones (Nations League), la desilusión era evidente en todos los internacionales alemanes.
Si bien la selección alemana mostró una actuación notablemente mejor frente a Francia, en comparación con el duelo anterior ante Cristiano Ronaldo y Portugal, el "Final Four" terminó dejando otras dos derrotas en el balance.
"Hoy vimos un equipo completamente diferente, con mucho más coraje que contra Portugal. Pero en el fútbol también cuenta la eficacia de cara al gol", declaró el seleccionador Julian Nagelsmann, aludiendo a las claras ocasiones desaprovechadas por su equipo. "Sabemos que, en cuanto a calidad individual, a veces estamos un poco por debajo de las grandes potencias. Y Francia es una de ellas. Pero hoy, en muchos momentos, fuimos el mejor equipo casi hasta la línea de meta".
Falta de profundidad en la plantilla
Los dos partidos dejaron claro que esta Alemania, mermada por las ausencias, sigue estando a un gran paso de la élite mundial, cuando solo queda un año para el Mundial en EE. UU., Canadá y México (del 11 de junio al 19 de julio de 2026). Las bajas de titulares como Antonio Rüdiger, Jamal Musiala o Kai Havertz fueron imposibles de compensar de forma adecuada por Nagelsmann.
Detrás del once titular, el nivel baja considerablemente. Además, en algunas posiciones falta clase internacional. Como ya ocurría hace algunos años, el lateral izquierdo y la delantera siguen siendo zonas problemáticas; y, en general, los extremos rápidos escasean.
"En cuanto a la profundidad de plantilla, debemos abandonar la ilusión de que lo solucionaremos en un año", admitió Nagelsmann de cara al Mundial 2026. "No podemos recuperar en dos años lo que se descuidó durante ocho".
Alemania, rezagada en formación juvenil
El problema señalado por Nagelsmann no es nuevo. Desde hace años, al fútbol alemán le faltan jóvenes talentos. Según un estudio a largo plazo encargado por la Federación Alemana de Fútbol (DFB) y la Liga Alemana de Fútbol (DFL), la formación de talentos de élite fue descuidada durante años.
"Mostramos que Alemania está claramente rezagada. Ningún club alemán figura entre los diez mejores de las cinco grandes ligas más Portugal en cuanto a formación de talentos", explicó el exentrenador de la Bundesliga Alexander Nouri, que participó en el estudio, en una entrevista con la plataforma Transfermarkt.de.
Otras selecciones sí tienen jóvenes líderes
En el extranjero, el trabajo con jóvenes ha dado frutos y ha generado un enorme valor, según Nouri. En España, destacan los ofensivos de 22 años Nico Williams y Pedri, así como el talento del siglo Lamine Yamal, que con solo 17 años ya suma varios títulos.
En Portugal, figuras como Nuno Mendes (22), Francisco Conceição (22) o Vitinha (25) ya son pilares del equipo nacional. Francia presenta un panorama similar: Michael Olise (22), del Bayern Múnich, y Désiré Doué (20), del PSG y autor de dos goles en la final de la Champions League, son claros ejemplos.
Nagelsmann: "Siento que este grupo tiene algo especial"
Pese a la falta de opciones y profundidad, la selección alemana ha demostrado que puede competir con las grandes potencias. "Lo que siempre debe estar al cien por ciento es nuestra disposición, nuestra actitud y nuestra mentalidad", dijo el capitán Joshua Kimmich. "Si eso funciona, podemos competir con cualquiera".
Bajo el mando de Nagelsmann, el equipo ha evolucionado pese a los reveses recientes y ha sentado una base. "Siento que este grupo tiene algo especial. Hay mucho potencial dormido. Queremos sacarlo a relucir", afirmó el técnico.
"Ritmo y minutos de juego son claves para tener un buen equipo. Al Mundial solo podremos llevar jugadores que puedan aportar eso", añadió el seleccionador de 37 años. Él sabe que, para vencer a los grandes, todo debe encajar perfectamente.
(gg/rml)