Luego del ataque aéreo israelí que destruyó instalaciones militares y nucleares iraníes en Natanz, Teherán y otras ciudades clave, el gobierno de Irán prometió represalias “decisivas” y colocó a sus fuerzas armadas en alerta máxima.
Las autoridades confirmaron el asesinato de altos mandos de la Guardia Revolucionaria como Hossein Salami y Mohammad Bagheri, así como de científicos ligados a su programa nuclear.
En respuesta, Irán lanzó más de 100 drones hacia territorio israelí que fueron interceptados en su mayoría. Sin embargo, hasta el momento no existe evidencia creíble ni declaraciones oficiales que indiquen que Irán tenga la intención de utilizar armas nucleares como represalia.
Tampoco hay indicios de que esté preparando un ataque atómico inmediato, según coinciden medios como The Guardian, The Washington Post y BBC.
Funcionarios iraníes, incluido el líder supremo Ali Khamenei, han utilizado un tono agresivo al señalar que “quienes atacan pagarán un alto precio” y que “la historia concluirá a favor del Islam”, pero sin mencionar el uso de armamento nuclear ofensivo.
Circulan mensajes falsos: esta no es una amenaza real
Pese a la tensión real entre ambas naciones, en redes sociales han comenzado a circular publicaciones atribuidas falsamente al gobierno iraní. Una cuenta verificada, pero de origen dudoso, que simula ser un canal oficial, difundió mensajes alarmantes como:
“La República Islámica de Irán realizará una explosión nuclear en las próximas horas. Los musulmanes no temen a la muerte, mientras que los sionistas deben temblar de miedo”.
“Estamos luchando una guerra por la humanidad. Irán está listo para detener la respiración de Israel”.
Estos mensajes no provienen de ninguna fuente oficial del gobierno iraní ni de sus canales diplomáticos. Se trata de una cuenta falsa que busca generar pánico, desinformación y exacerbar el miedo en medio de un contexto ya tenso.
Hasta ahora, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán y las agencias estatales no han emitido ninguna amenaza de carácter nuclear.
Analistas internacionales han advertido sobre el uso de cuentas apócrifas en conflictos como el actual, que pueden ser operadas por actores ajenos con el fin de escalar la narrativa de guerra, provocar reacciones desmedidas o manipular la opinión pública.
¿Qué podría pasar realmente?
Aunque Irán podría intensificar su programa nuclear como respuesta al ataque —e incluso retirarse del Tratado de No Proliferación Nuclear, como lo han sugerido expertos—, el uso de bombas atómicas no está en el panorama inmediato, ni forma parte de las represalias que hasta ahora se han concretado.
Israel, por su parte, ha indicado que está dispuesto a continuar con las operaciones militares “los días que sean necesarios”, mientras sus aliados, como Estados Unidos, advierten a Irán del “alto costo” de cualquier agresión mayor.