Norma Reyes, una de las dos mujeres implicadas en la muerte de Daryl, ahora busca que la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México le pague un peritaje especial para intentar deslindarse del crimen, según información del periodista Carlos Jiménez.
Pese a estar detenida y señalada por testigos, la llamada “gotera” exige que se analicen las bebidas consumidas por el joven para “demostrar” que sus huellas no están ahí.
Norma Reyes quiere limpiar su nombre... con recursos de la Fiscalía
Carlos Jiménez confirmó en su cuenta de X que la defensa de Norma solicitó a la Fiscalía capitalina un peritaje forense especializado en residuos dactilares.
El argumento es para confirmar que sus huellas no estaban en los vasos de las bebidas que presuntamente se usaron para drogar a Daryl. La solicitud busca desacreditar la versión de los testigos y deslindarla del homicidio.
Ligaron, drogaron y huyeron: así ocurrió el crimen
Norma Reyes, de 42 años, fue detenida tras una investigación que inició en marzo de 2024, cuando Daryl y su amigo Juan conocieron a dos mujeres —Norma y su hija Fernanda Reyes— en una mezcalería de la alcaldía Cuauhtémoc. Luego de coquetear con ellos, los convencieron de ir al Hotel Picasso en Iztapalapa, donde los drogaron con una sustancia aún no determinada.
Daryl fue encontrado sin vida en la habitación 115 del hotel, mientras que su amigo logró sobrevivir. Cámaras de seguridad captaron a ambas mujeres saliendo del lugar con pertenencias robadas. Norma fue arrestada semanas después en una concesionaria de autos sobre Calzada de Tlalpan, en la alcaldía Benito Juárez.

Hasta el momento, cuatro testigos ya la han señalado directamente como una de las responsables del crimen, según Jiménez. Sin embargo, Norma insiste en defender su inocencia con un peritaje. La otra implicada, Fernanda Reyes —hija de Norma—, continúa prófuga.