Mark Latunski, conocido como “el caníbal de Grindr”, se enfrenta a cadena perpetua después de admitir el homicidio y mutilación de su cita a través de una aplicación de encuentros. En diciembre de 2019, Kevin Bacon, de 25 años, fue atraído al domicilio de Latunski en Michigan tras contactarlo por Grindr. Allí fue asesinado, colgado cabeza abajo del techo, mutilado y parcialmente consumido.
Latunski, quien tiene 53 años y es químico de profesión, había sido diagnosticado anteriormente con depresión severa, paranoia y comportamientos psicóticos. En octubre de 2019, se supo que otro individuo consiguió huir de su sótano después de haber estado encadenado, revelando una tendencia a la conducta violenta.
Una de sus víctimas
El cadáver de Kevin Bacon fue encontrado el 27 de diciembre de 2019, desmembrado y suspendido del techo en la residencia de Latunski. Latunski admitió ante la policía que lo había asfixiado, lo castró y comió una porción de sus genitales “como parte de un fetiche sexual perturbador”.
En octubre de 2022, un jurado lo encontró culpable de asesinato en primer grado con premeditación y de desmembramiento de un cuerpo. En diciembre del mismo año, fue sentenciado a prisión de por vida sin opción de libertad condicional.
En el transcurso del juicio, el fiscal describió el acto de Latunski como “fríamente calculado” y presentó que él había previsto deshidratar porciones del cuerpo con el objetivo de “hacer jerky”.
La defensa argumentó sobre su salud mental, mencionando diagnósticos psiquiátricos y utilizando primero una táctica de declaración de incompetencia, pero más tarde se estableció que era capaz de enfrentar el proceso legal.
Este incidente conmovió a la comunidad LGBT+ y provocó una discusión sobre la seguridad en aplicaciones de citas. Las autoridades exhortaron a tomar precauciones maximizadas al organizar encuentros con personas desconocidas, subrayando la importancia de tener advertencias explícitas y estrategias para salvaguardar a posibles usuarios en situación de vulnerabilidad.