Matthew Allen, agente especial de la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA), reveló que el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) espió a agentes de esa corporación y testigos durante el juicio que se le siguió a Rubén Oseguera González, “El Menchito”.
Durante una audiencia que se realizó este martes, el agente explicó que el cártel liderado por Nemesio Oseguera, “El Mencho” se dedicó a vigilar a informantes y agentes de la DEA que participaron en el juicio contra Oseguera González, el que fue declarado culpable en septiembre de 2024 de varios delitos de narcotráfico cometidos en Estados Unidos.
“Durante el juicio del ‘Menchito’, hijo del máximo líder del CJNG, se descubrió que miembros del cártel vigilaban a agentes e informantes de la DEA, aquí en Washington. Como resultado directo de la captura y el procesamiento de ‘Menchito’, el CJNG contraatacó en México, disparó contra la esposa y asesinó a la hija de un informante, además de asesinar a un soldado del Ejército mexicano”.
El Financiero detalló que Matthew Allen dirige la División en los Ángeles de la DEA, en su comparecencia destacó que Estados Unidos no enfrenta a simples pandilleros, sino a criminales extranjeros.
“No estamos lidiando con traficantes callejeros ni contrabandistas. Nos enfrentamos a una infiltración a gran escala de imperios criminales extranjeros. Son organizaciones paramilitares con cadenas de suministro globales, logística corporativa y tácticas de combate”.
Un jurado federal de Washington declaró culpable a “El Menchito” culpable de dos cargos por asociación delictuosa, distribución de cocaína y metanfetaminas para su importación a Estados Unidos y por utilizar un arma de fuego en una trama de narcotráfico, por lo que fue condenado a cadena perpetua.
El hijo de Nemesio Oseguera fue el segundo al mando de dicho cártel antes de ser extraditado a Estados Unidos en febrero de 2020.
Su primera detención ocurrió el 30 de enero de 2014 en Zapopan, Jalisco, en un operativo del Ejército y la Marina, en una finca de la colonia Patria Universidad junto a cuatro personas, se aseguraron cuatro armas largas, cuatro cortas, más de 17 millones de pesos y 600 mil dólares en efectivo, pero en octubre fue liberado por falta de pruebas.
Sin embargo, apenas puso un pie fuera de la cárcel y fue detenido de nuevo por autoridades federales por los delitos de delincuencia organizada y lavado de dinero, pero quedó libre el 3 de enero de 2015.
El 23 de junio de 2015 fue detenido de nuevo en el mismo municipio, pero en el fraccionamiento Lomas de Altamira, viajaba en un vehículo junto a su cuñado y sin escoltas, ya que se había sometido recientemente a una cirugía de nariz.
