Una celebración comunitaria terminó en masacre en la colonia Barrio Nuevo de Irapuato. Un grupo armado abrió fuego contra los asistentes de una fiesta patronal, dejando al menos 10 personas muertas, entre ellas a un supuesto menor de dos años.
El ataque ocurrió durante la noche del martes, mientras vecinos festejaban el día de San Juan. Videos compartidos en redes sociales muestran cómo la música fue interrumpida por las detonaciones, provocando pánico y gritos entre los asistentes.
Ataque armado en plena celebración de San Juan
El tiroteo ocurrió sobre la calle Bustamante, donde decenas de personas —incluidos niños, jóvenes y adultos— bailaban al ritmo de una banda durante la fiesta patronal. En cuestión de segundos, el ambiente festivo se transformó en terror.
En las grabaciones difundidas, se escuchan múltiples disparos, gritos de mujeres y personas corriendo en busca de resguardo.
De acuerdo con los reportes preliminares, al menos diez personas perdieron la vida, entre ellas un niño de dos años, mientras que más de una docena resultaron heridas por los disparos.
Las víctimas fueron atendidas en el lugar y trasladadas a hospitales cercanos, aunque hasta el momento no se ha precisado su estado de salud.
Operativo de seguridad y atención a familiares
Tras el ataque, fuerzas de seguridad locales, estatales y federales desplegaron un operativo en la zona para intentar dar con los responsables. Elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, la Guardia Nacional, el Ejército y las Fuerzas de Seguridad Pública del Estado participaron en la movilización.
En un comunicado, las autoridades locales informaron que personal del Centro de Atención Integral a Víctimas (CAIV) acudió al sitio para ofrecer atención psicológica, asesoría legal y acompañamiento a las familias afectadas.

Asimismo, confirmaron que trabajan en conjunto con la Fiscalía General del Estado de Guanajuato para esclarecer lo ocurrido y castigar a los responsables.
Este ataque ha generado profunda indignación entre la población, no solo por el número de víctimas, sino por la violencia ejercida en un contexto familiar y religioso.