Organizaciones humanitarias advierten de peligros para millones de personas en tiempos de conflictos. El mundo invierte masivamente en armamento, pero se recorta drásticamente en ayuda a los más países pobres.Michael Herbst esperó en vano un cambio de actitud en el nuevo Gobierno alemán, formado por la unión conservadora CDU/CSU, y el socialdemócrata SPD: "Nuevos recortes serían absolutamente irresponsables", advirtió el presidente de la Asociación Paraguas de Organizaciones de Cooperación para el Desarrollo (VENRO) un día antes de la publicación del proyecto de presupuesto para 2025.
Desde el 24 de junio, sus temores se volvieron certezas: el presupuesto estatal prevé recortes masivos a la ayuda al desarrollo. El Ministerio Federal de Cooperación Económica y Desarrollo (BMZ) recibirá solo 10.300 millones de euros, casi 1.000 millones menos que en 2024, el segundo recorte consecutivo. Cuán dramática es la reducción de esos fondos se ve mirando atrás, hacia 2022. En ese año, Alemania gastó 13.800 millones de euros en ayuda al desarrollo.
"Más de 100 millones de personas huyen” de guerras en el mundo
El jefe de VENRO ejemplificó lo que significan estos drásticos recortes para las personas afectadas en un mundo donde cada vez hay más guerras y conflictos: "Más de 100 millones de personas están huyendo. Al mismo tiempo, cada vez más países donantes se retiran. Por eso es necesaria una financiación estable por parte del Gobierno alemán de la cooperación al desarrollo y la ayuda humanitaria, pero lo contrario es el caso”.
Lo que agrava la situación, desde su punto de vista, es el recorte de un 53 por ciento, en cerca de 1.000 millones de euros, de la ayuda humanitaria. Herbst considera que esto demuestra falta de visión: "Como la tercera economía del mundo, Alemania puede y debe asumir responsabilidad y no debe seguir recortando sus presupuestos en esas áreas”, exige.
¿Está dañada la reputación de Alemania en el sur global?
Su argumento, que se topa con oídos sordos en el Gobierno alemán, es que "como país exportador, Alemania depende de las buenas relaciones y de la estabilidad global”. Y afirma que "la economía alemana se beneficia de una buena reputación y de la fortaleza de las relaciones con países del sur global. Eso también asegura puestos de trabajo en nuestro país”.
Los recortes llegan en un momento en el que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, inició justo al comienzo de su segundo mandato profundos recortes en la ayuda al desarrollo, de cerca de un 80 por ciento.
Alemania no llega a cumplir el objetivo del 0,7 por ciento
Debido a la drástica reducción del presupuesto del BMZ, ya la llamada tasa de AOD (Ayuda Oficial al Desarrollo) ya había caído por debajo de la meta autoimpuesta del 0,7 por ciento del ingreso nacional bruto en 2024. Desde 2020, se había mantenido consistentemente por encima de ese objetivo.
La organización de ayuda no gubernamental y sin fines de lucro Deutsche Welthungerhilfe y la organización de ayuda a la infancia Terre des Hommes consideran que los recortes son una señal fatal, sobre todo porque los partidos conservadores CDU y CSU y el socialdemócrata SPD ya no se comprometen explícitamente con el objetivo del 0,7 por ciento en el acuerdo de coalición: "Con esto, el Gobierno federal anuncia no solo una desviación financiera sino también política de sus obligaciones internacionales", critican ambas organizaciones en su informe "Kompass 2025" sobre política de desarrollo, presentado a mediados de junio.
¿Quién asume el liderazgo en la política de pacificación?
El secretario general de Deutsche Welthungerhilfe, Joshua Hofert, insta al Gobierno alemán, en vista de un mundo cada vez menos pacífico, a asumir un papel protagónico en las políticas de paz, con más de 30 páginas que contienen numerosas recomendaciones para los responsables políticos y gráficos ilustrativos sobre la cooperación al desarrollo.
"Alemania debe comprometerse con un respeto consecuente del derecho internacional humanitario y de los principios humanitarios, así como con el acceso a la ayuda y la protección de la población civil en guerras y conflictos. Además, debe comprometerse para que el hambre no sea utilizada como arma de guerra”, se lee en las declaraciones de esa organización.
Dinero para armamento: 2,7 billones de dólares, según SIPRI
En mayo, el Instituto Internacional de Estudios para la Paz de Estocolmo (SIPRI) reportó un nuevo récord de acumulación armamentística mundial en su informe anual: 2,7 billones de dólares en gasto militar. Esto representa un aumento de casi el diez por ciento. Además, la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) planea acordar en su cumbre de La Haya que cada Estado miembro dedique anualmente el cinco por ciento de su producto interno bruto al gasto de defensa.
En este contexto, la disminución global de la financiación para la ayuda al desarrollo resulta especialmente impactante. Ya se prevén consecuencias dramáticas, sobre todo en la ayuda humanitaria. Estados Unidos ha suspendido por completo su apoyo a la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA). Debido a los masivos recortes globales, el coordinador de ayuda de emergencia, Tom Fletcher, se ve obligado a eliminar numerosos programas de ayuda para los más pobres.
Ayuda humanitaria solo para 114 millones de 180 millones de personas necesitadas
Los efectos de los recortes golpearán a las personas más necesitadas y hambrientas y serán devastadores, dijo Fletcher semanas atrás. En lugar de 44.000 millones de dólares, el representante de la ONU cuenta con que solo habrá 29.000 millones para la distribución de alimentos, agua, medicinas, refugios y otros bienes humanitarios. Así las cosas, la ayuda humanitaria mundial solo alcanza para 114 millones de personas, en lugar de 180 millones.
Los países que ya son los más pobres del mundo serán los más afectados, entre ellos, Burundi, Mozambique y Liberia, donde la ayuda al desarrollo de los países donantes representaba en 2023 entre un 24 y un 14 por ciento del volumen de la economía. Las consecuencias concretas: venta de animales de ganado y de herramientas de trabajo para sobrevivir, lo que reduce sus posibilidades de ganarse la vida a largo plazo. Un círculo vicioso.
Tanto Deutsche Welthungerhilfe como Terres des Hommes critican al Gobierno alemán, que, en su contrato de coalición, considera los recortes "adecuados”. "Esto es contrario a sus objetivos igualmente declarados de garantizar una financiación adecuada a la ayuda humanitaria, especialmente si otros donantes se retiran", replican las organizaciones de ayuda.
La ministra alemana de Desarrollo, Reem Alabali Radovan (SPD), sin embargo, aseguró que Alemania cumplirá con su responsabilidad en el mundo, "a pesar de los dolorosos recortes presupuestarios previstos en el sector del desarrollo según el acuerdo de coalición”.
Este artículo se publicó el 17 de junio de 2025 y ha sido ampliamente actualizado tras la publicación del proyecto de presupuesto del Gobierno alemán para 2025.
(cp/el)