Ocho migrantes, entre los cuales se encontraba un mexicano, fueron deportados desde los Estados Unidos y trasladados a Yibuti, un país africano. El caso causó conmoción ante las nueva medidas del presidente Donald Trump para las deportaciones a terceros países.
Sin embargo, no permanecieron en la base militar estadounidense de Yibuti, sino que se encuentran abandonados en Sudán del Sur, donde podrían recibir torturas debido a la crisis política del país.
Migrantes abandonados en África
El Departamento de Seguridad Nacional informó sobre la deportación de un grupo de ciudadanos de Cuba, de Laos y un mexicano. Las autoridades mencionaron que, debido a la gravedad de sus crímenes, no no serían aceptados en otros países, excepto en Yibuti.
“Realizamos un vuelo de deportación desde Texas para sacar ilegalmente a algunos de los individuos más bárbaros y violentos de los Estados Unidos. Ningún país del mundo quería aceptarlos porque sus crímenes eran singularmente monstruosos y bárbaros”, escribió la dependencia en X.
En Yibuti se encuentra una base militar estadounidense, lugar al que fueron deportados. Sin embargo, el caso llamó la atención en México debido a la presencia de un connacional dentro del grupo enviado a África.
“El 12 de mayo de 2025, el ICE arrestó al ciudadano mexicano Jesús Muñoz Gutiérrez. Fue declarado culpable de asesinato en segundo grado y condenado a cadena perpetua”, detalló las autoridades estadounidenses.
Sin embargo a principios de julio se comunicó que el Tribunal Supremo de Estados Unidos permitió que los ocho migrantes fueran trasladados a Sudán del Sur. Sin embargo, esto provocó más cuestionamiento, debido al uso de terceros países para la deportación.
A pesar de que abogados y jueces activistas han señalado la falta a los derechos humanos, el Tribunal aceptó recientemente el envío a Sudán del Sur, donde podrían recibir torturas debido a las condiciones desfavorables dentro del país.
