Durante la temporada de calor, muchas personas aprovechan para realizar actividades al aire libre, especialmente en playas, ríos y albercas. Sin embargo, la exposición frecuente al agua puede incrementar el riesgo de padecer otitis externa, una infección en el oído conocida comúnmente como “otitis de verano”, que puede derivar en complicaciones graves si no se atiende a tiempo.
De acuerdo con Dulce María García Jacuinde, audióloga y especialista de MED-EL México, la otitis externa afecta el conducto auditivo externo y es más frecuente en los meses cálidos. Esta condición puede provocar dolor intenso, secreción y disminución auditiva, e incluso derivar en pérdida parcial o total de la audición si no se trata adecuadamente.

“El uso constante de piscinas con altos niveles de cloro puede alterar el equilibrio natural del oído, creando un ambiente ideal para bacterias y hongos”, advierte la especialista de MED-EL México. En casos severos, podrían ser necesarios dispositivos auditivos avanzados o implantes cocleares para restaurar la función auditiva.
¿Qué causa la otitis de verano?
La principal causa de la otitis externa es el ingreso de agua contaminada al oído, que favorece la inflamación e infección del conducto auditivo. Según la Secretaría de Salud, aproximadamente el 10% de la población mundial ha sufrido esta afección alguna vez en su vida.
Aunque puede afectar a personas de todas las edades, los niños son especialmente vulnerables debido a la anatomía de sus oídos, que dificulta el drenaje del líquido. También están en riesgo:
- Nadadores frecuentes
- Personas con piel sensible o afecciones cutáneas
- Individuos con sistema inmunológico debilitado
Síntomas de alerta
Los signos más comunes de la otitis de verano incluyen:
- Dolor de oído
- Secreción y picor
- Sensación de oído tapado
- Disminución de la audición
- Dolor al masticar, mareos o dolor de cabeza

¿Cómo prevenir y tratar la otitis externa?
Los expertos recomiendan evitar la automedicación y acudir de inmediato a un especialista al notar síntomas. El tratamiento oportuno es clave para evitar daños mayores. En los casos más graves, la pérdida auditiva puede ser irreversible, por lo que se requiere la intervención de un profesional para valorar el uso de soluciones tecnológicas como implantes cocleares.
Estos dispositivos permiten restaurar la audición en personas con hipoacusia severa o profunda, siendo el único sentido que puede recuperarse mediante tecnología médica.
Disfrutar el verano sin poner en riesgo tu audición
Si bien el verano es ideal para disfrutar del agua, es fundamental proteger los oídos, especialmente en niños y personas con antecedentes de infecciones. Escuchar al cuerpo, detectar síntomas y consultar al especialista a tiempo puede marcar la diferencia entre una molestia temporal y una condición que afecte de forma permanente la calidad de vida.