Duro y sin filtros: siete de cada diez trabajadores en México ya no quieren “ponerse la camiseta” de su empresa; están agotados, resentidos, hartos de jefes ineficientes y atrapados en un día a día donde apenas hay tiempo para cenar en casa antes de volver al trabajo.
Los estudios más recientes y especialistas consultados por Publimetro explicaron que el problema no es una simple queja o denuncia; se trata de una crisis que –de acuerdo con Organización Internacional del Trabajo (OIT)– cuesta 40 mil millones de dólares a nivel global.
Como lo leíste, el hartazgo, estrés laboral, el burnout –agotamiento físico y mental de los empleados– y la falta de compromiso –que los mexicanos llamamos ‘dejar de ponerse la camiseta’– cuesta alrededor de 748 mil millones de pesos anuales; algo así como 11 veces el presupuesto nacional de salud.
La firma especializada en análisis y consultoría Gallup precisó que, por sí sola, la falta de compromiso laboral genera pérdidas por 8.9 billones de dólares anuales, equivalentes a 9% de toda la riqueza mundial, medida a través de Producto Interno Bruto (PIB).
Falta de compromiso laboral azota a México
La Embajadora de Capacitación en la firma de recursos humanos Hooman, Ivonne Vargas, explicó siete de cada 10 colaboradores mexicanos enfrentan fatiga, estrés, sobrecarga de trabajo, burnout y problemas de comunicación con sus jefes y directores.
Señaló que, en tales condiciones, 70% de los empleados del país ya no se ponen la camiseta de la empresa, bajan su productividad, se ausentan o caen en problemas del presentismo laboral: asisten al trabajo y cumplen con lo mínimo requerido, porque no se sienten motivados o tienen otras preocupaciones.
“Los estudios indican que 72% de las personas en México sufrió burnout –fatiga laboral– durante el último año; 12% dice que lo vive de forma frecuente y alrededor de 10% termina por renunciar e irse a otra empresa a la primera oportunidad.
“El interés laboral se pierde por una combinación de factores, iniciando por una sobrecarga emocional, ausencia de control dentro del propio espacio de trabajo y por el liderazgo ineficiente de los jefes; lo que en su conjunto genera un resentimiento pasivo entre los empleados”, apuntó Ivonne Vargas.
Empresas, campos de resistencia en México
La embajadora de Hooman explicó que, bajo las condiciones descritas, miles de empresas se convirtieron en verdaderos “campos de resistencia”, que contienen al trabajador mientras encuentra otro empleo.
“Si al salir del trabajo no tengo tiempo más que para ir a mi casa, cenar o estar con la familia y volver a empezar al día siguiente, tengo un problema. Esas son pequeñas o grandes alertas de que una persona a la primera oportunidad va a renunciar”, comentó.
Y, subrayó, en ese sentido las organizaciones necesitan entender que la fatiga laboral, el resentimiento de los empleados y la decisión de ya no ponerse la camiseta son problemas que deben resolver, por el bienestar de los colaboradores y porque provocan la pérdida de 30% de la productividad.
Pero –señaló– las soluciones deben ir más allá del home office, esquemas de trabajo híbridos o publicar programas de bienestar, contra el estrés o para el cumplimiento de la NOM 035, que solo palomean a la empresa, pero no atienden las causas descritas a fondo: con mediciones, proyectos y acciones precisas.
Empleados renuncian al jefe
Las cifras más recientes del Instituto del Propósito y Bienestar Integral (IPBI) del Tecmilenio, revelaron que los liderazgos ineficientes –o malos jefes– son una pieza clave en la falta de compromiso y la renuncia de los empleados, que ya no se ponen la camiseta.
Reportó que, al preguntar: ¿la relación con tu líder te hace sentir energía y vitalidad para estar en el trabajo?, las respuestas afirmativas pasaron de una tasa de 4.1 puntos en 2021 a 3.9 puntos en el 2024, en una escala de 1 a 5 unidades.
Ello, detalló, donde 1 es equivalente a una relación “inexistente” y 5 es “excelente”; de tal suerte que, cuando las tasas se acercan o se ubican en 3.5 unidades, ya es una nota reprobatoria.
Apuntó que, 71% de las compañías en México dicen que tienen mecanismos y procesos para sensibilizar a los líderes; pero en los hechos solo cuatro de cada 10 tienen las herramientas para ejercer un liderazgo eficiente.
No todo es trabajo
El instituto señaló que al preguntar a los colaboradores mexicanos si, al salir del trabajo tiene tiempo y energía para hacer lo que les gusta o convivir con la gente que quiere, las cifras reportan:
- 40% de los colaboradores están en desacuerdo con tal afirmación.
- 29% está totalmente de acuerdo.
Se trata de una encuesta, aplicada a más de 20 mil colaboradores en México, que evidencian que “en efecto, hay una posibilidad real de que puedas tener vida personal” y que no todo es trabajo.