La NASA confirmó que trabaja en la construcción de un reactor nuclear que será instalado en la superficie de la Luna a finales de esta década, como parte de una estrategia que combina objetivos científicos, económicos y de seguridad nacional.
El anuncio fue hecho por Sean Duffy, actual secretario de Transporte de Estados Unidos y administrador interino de la agencia espacial, quien urgió a acelerar el proyecto.
“Es fundamental avanzar rápido para garantizar energía de alta potencia que permita el desarrollo de una economía lunar, el soporte de misiones en Marte y fortalecer la seguridad nacional en el espacio”, declaró Duffy en conferencia de prensa.

Carrera hacia la Luna
El plan contempla tener el reactor operando en la Luna para el año 2030. La planta generará al menos 100 kilovatios de energía eléctrica, una cantidad suficiente para abastecer unas 40 viviendas en la Tierra de forma simultánea. Esta energía permitirá a Estados Unidos establecer una base lunar estable y eventualmente lanzar misiones tripuladas hacia Marte.
Duffy destacó que la iniciativa, que ha sido discutida desde las administraciones de Donald Trump y Joe Biden, ahora toma urgencia debido a la competencia internacional. China y Rusia también planean desarrollar reactores lunares alrededor de 2035.
Según el funcionario, si esos países se adelantan, podrían declarar zonas de exclusión en la superficie lunar, limitando las operaciones estadounidenses.
“Estamos en la carrera hacia la Luna con China”, advirtió el jefe interino de la NASA, quien recordó que el Gobierno ya ha invertido “cientos de millones de dólares” en estudios para viabilizar el proyecto.

¿Dónde instalarán el reactor lunar?
La zona objetivo del reactor es el polo sur lunar, donde las condiciones geográficas ofrecen ventajas para la exploración y permanencia prolongada. Se trata de una región con áreas permanentemente en sombra y con posibilidad de presencia de hielo, lo que la hace atractiva tanto para generación de energía como para recursos vitales.
El desarrollo de esta tecnología forma parte de la estrategia estadounidense para consolidar una presencia permanente en la Luna. En esa línea, la NASA lanzará en 2026 la misión Artemis 2, en la que cuatro astronautas orbitarán el satélite, y posteriormente, Artemis 3, que buscará concretar un nuevo alunizaje con una estadía de seis días, el doble del récord anterior.
Aunque aún no se ha revelado cuál será el combustible exacto que alimentará el reactor, el Gobierno de Estados Unidos planea realizar un anuncio oficial más adelante.