Las autoridades francesas enfrentan una emergencia sin precedentes luego de que un incendio forestal arrasara entre 13,000 y 16,000 hectáreas en una zona boscosa del sur del país. La magnitud del siniestro lo convierte en el mayor registrado en Francia en lo que va del 2025.
Más de 2,000 bomberos, apoyados por aviones y helicópteros cisterna, han sido desplegados para intentar contener el avance de las llamas, que se propagan rápidamente debido a las condiciones climáticas extremas. A pesar de los esfuerzos, el fuego continúa activo y fuera de control.
Una víctima mortal, heridos y caos en la zona
Una mujer de edad avanzada perdió la vida tras negarse a evacuar su domicilio. Además, se reportan al menos nueve personas heridas —varios de ellos bomberos— y una persona más permanece desaparecida. Las autoridades locales han ordenado evacuaciones urgentes en distintas comunidades y han cerrado carreteras, incluida una autopista principal que conecta con otros países de Europa.
La intensidad del fuego ha provocado escenas dramáticas, con viviendas amenazadas, animales atrapados y columnas de humo visibles a varios kilómetros de distancia.
Ola de calor agrava la situación
Este incendio ocurre en medio de una intensa ola de calor que afecta a varias regiones del país, con temperaturas que superan los 40 grados Celsius. Las condiciones de sequedad extrema y los vientos han convertido vastas áreas rurales en un terreno fértil para el fuego.
Las autoridades han declarado el estado de emergencia en la zona afectada y han pedido a la población no desplazarse salvo por causas de fuerza mayor. Se teme que las condiciones climáticas empeoren en los próximos días, lo que dificultaría aún más las labores de contención.