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Periodistas que salvaron a Apolo, husky que pasó 9 días sin agua ni comida, temen demanda penal

El rescate de Apolo desató indignación en redes sociales y abrió debate sobre protocolos de emergencia para salvar animales

Usuarios de redes sociales impulsaron la tendencia #AguantaApolo, exigiendo justicia y denunciando el abandono que sufrió el husky en Azcapotzalco.
Usuarios de redes sociales impulsaron la tendencia #AguantaApolo, exigiendo justicia y denunciando el abandono que sufrió el husky en Azcapotzalco. Foto: Óscar Balderas

Los periodistas Oscar Balderas y Laura Sánchez Ley podrían enfrentar una denuncia penal por haber salvado a Apolo, un husky abandonado que pasó nueve días sin agua ni comida dentro de una casa abandonada en Azcapotzalco, Ciudad de México, de acuerdo con reportes de los mismos comunicadores en redes sociales.

Balderas y Sánchez Ley compartieron en redes sociales cómo, tras constatar la inacción de las autoridades, decidieron ingresar al predio para rescatar al animal. Según relataron, Apolo estaba desfallecido, solo y en condiciones de abandono absoluto. La decisión, explicaron, no obedeció a un impulso, sino a la urgencia: esperar una orden judicial pudo haber significado la muerte del perro.

“Si una vida está en peligro, no pienso esperar a ningún trámite burocrático. Al igual que ustedes, me salto la barda”, escribió Oscar Balderas en X.

Sin embargo, tras salvar a Apolo, ambos periodistas aseguraron que ahora corren el riesgo de ser denunciados penalmente por supuestos delitos como asociación delictuosa o allanamiento.

Esto en respuesta a otra publicación en la que se señala que la Brigada de Vigilancia Animal (BVA) de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México (SSC CDMX) estaría valorando un reporte contra los comunicadores por haber actuado por sus propios medios.

PAOT bajo fuego: citatorio, pero sin agua ni croquetas

Previo al rescate, la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial (PAOT) reconoció en redes sociales que había acudido al domicilio en la colonia Santa Cruz Acayucan, Azcapotzalco. En su visita, constataron que el perro estaba dentro, pero al no encontrar a los responsables, solo dejaron un citatorio pegado en la puerta y se retiraron.

Lejos de calmar los ánimos, el anuncio encendió la indignación. Laura Sánchez Ley calificó de “aberrante” que, en lugar de lanzar croquetas o agua, los funcionarios simplemente notificaran en papel.

Tras el rescate, Apolo fue trasladado a un lugar seguro, donde cuenta con techo, cama, comida, agua y cuidados constantes. Balderas lo describió como un perro noble y aseguró que su ubicación se mantiene en reserva por motivos de seguridad.

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