La periodista Laura Sánchez Ley confirmó este lunes que ya existe una denuncia en su contra y en contra de Oscar Balderas por haber rescatado a Apolo, el husky que permaneció nueve días sin agua ni comida dentro de una vivienda abandonada en Azcapotzalco, Ciudad de México.
En un mensaje en su cuenta de X, Sánchez Ley informó que el supuesto dueño del perro ya se presentó ante la policía y procedió legalmente contra los periodistas, acusándolos de delitos como allanamiento de morada y asociación delictuosa.
“Desgraciadamente el dueño de Apolo apareció ya en la policía. Y sí, nos demanda por varios delitos. Muy triste empezar un proceso desgastante al que solo tendremos acceso hasta que nos juzguen”, escribió la reportera.
“Estoy devastada, pero no me arrepiento”
Visiblemente afectada, Sánchez Ley aseguró que está devastada por la posibilidad de enfrentar prisión, pero dejó claro que no se arrepiente de haber salvado al animal.
“Estoy devastada y muy angustiada de que exista la posibilidad de ir a la cárcel, aún así no me arrepiento de sacarlo de ese lugar”, expresó, acompañando su publicación con una imagen del husky.
Apolo está a salvo, pero quedan más perros en riesgo
Tras su rescate, Apolo fue llevado a un sitio seguro, donde ya cuenta con cuidados, alimento y compañía. Sin embargo, la periodista advirtió que todavía hay tres perros más en la misma casa, pertenecientes a la misma familia, que siguen abandonados y sin recibir apoyo por parte de las autoridades.
“Ahora quedan tres perritos, nosotros enfrentando la posibilidad de prisión y la PAOT y Brigada Animal aún no los rescatan”, denunció Sánchez Ley, arrobando a la jefa de Gobierno, Clara Brugada.
Indignación y respaldo ciudadano
La confirmación de la denuncia encendió aún más la indignación en redes sociales, donde miles de usuarios consideran absurda la situación: los periodistas que salvaron una vida enfrentan cargos, mientras que el abandono animal queda impune.
El caso de Apolo se ha convertido en un símbolo de la lucha contra el maltrato animal y la burocracia indolente, con el hashtag #AguantaApolo como estandarte de apoyo ciudadano.