En el marco de la ceremonia conmemorativa del Grito de Independencia organizada por la Embajada de México en España, el embajador Quirino Ordaz Coppel protagonizó una polémica al contar entre los invitados principales con el fiscal general del Estado de España, Álvaro García Ortiz, actualmente imputado por el Tribunal Supremo por un presunto delito de revelación de secretos.
La presencia del fiscal español en primera fila ha levantado críticas debido a la situación legal que enfrenta. García Ortiz es el primer fiscal general del Estado en España en ser juzgado en la historia del país.
El caso se centra en la presunta filtración de un correo electrónico confidencial, enviado por el abogado de Alberto González Amador, pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, en el marco de una investigación por fraude fiscal y falsedad documental. La información contenida en dicho correo se publicó en varios medios antes de que la fiscalía emitiera una nota oficial, lo que originó la investigación.
Según el juez instructor, Ángel Hurtado, hay indicios suficientes para juzgar al fiscal por revelación de secretos conforme al artículo 417 del Código Penal de aquel país. Además, se le impuso una fianza de 150 mil euros. García Ortiz ha negado las acusaciones, asegurando que no filtró el correo ni dio órdenes para hacerlo, y se ha limitado a declarar sólo ante la fiscalía y la Abogacía del Estado.
Quirino Ordaz, de priísta indisciplinado a diplomático
En tanto, la carrera diplomática de Quirino Ordaz también ha estado rodeada de controversia. En septiembre de 2021, el presidente Andrés Manuel López Obrador lo invitó a sumarse al gobierno por su “buena labor” como gobernador de Sinaloa, a pesar de su militancia en el PRI. Su aceptación del cargo provocó su expulsión del partido por “indisciplina grave”. En 2022, el Gobierno español otorgó el beneplácito para su designación como embajador de México en España, puesto que ocupa al 12 de septiembre de 2025.
Durante su gestión como embajador, Quirino Ordaz ha buscado fortalecer la inversión bilateral y las relaciones diplomáticas entre México y España, en un contexto sensible marcado por tensiones históricas derivadas del pasado colonial. No obstante, decisiones como la reciente invitación al fiscal imputado han generado cuestionamientos sobre el criterio diplomático del representante mexicano.
Mientras tanto, en España, el juicio contra Álvaro García Ortiz se celebrará en los próximos meses, salvo que renuncie antes al cargo. El gobierno de Pedro Sánchez ha cerrado filas en su defensa, aunque varias asociaciones de fiscales han exigido su dimisión para proteger la imagen del Ministerio Público.