El buque escuela de la Armada de México: Cuauhtémoc, volvió este miércoles a la actividad marítima en Nueva York, cuatro meses después del accidente en el que impactó contra el puente de Brooklyn y murieron dos cadetes.
De acuerdo con un comunicado del Consulado General de México en Nueva York, el navío realizó un zarpe simbólico de prueba por las aguas que rodean la Gran Manzana, luego de que especialistas de astilleros concluyeran con éxito las reparaciones.
El acto estuvo encabezado por el capitán Víctor Hugo Molina, comandante del buque, y contó con la presencia del cónsul mexicano en Nueva York, Marcos Bucio, así como de agregados navales y militares de México en Washington y ante la ONU. Bucio reconoció la disciplina y el profesionalismo de la tripulación, subrayando que el navío representa “el espíritu de servicio con el que México se proyecta en altamar”.

El embajador del mar
El Cuauhtémoc, conocido como el embajador y buque insignia de la Marina mexicana, tiene previsto zarpar de Nueva York a inicios de octubre para regresar a México.
El Consulado destacó que este nuevo viaje será “una travesía cargada de memoria, resiliencia y honor” tras la tragedia del 17 de mayo, cuando los cadetes América Yamileth Sánchez y Adal Yahir Maldonado perdieron la vida al caer desde el mástil que se partió en el impacto contra el puente.

El cónsul Bucio agradeció al alcalde de Nueva York, Eric Adams, y al embajador mexicano en Estados Unidos, Esteban Moctezuma Barragán, por la solidaridad y el acompañamiento institucional tras el accidente.
El Cuauhtémoc, construido en 1982, transportaba a 277 tripulantes al momento del percance. En los próximos días, el Consulado apoyará en trámites migratorios a los 176 nuevos cadetes que se incorporarán a la embarcación en Nueva York para continuar con la misión de diplomacia pública, formación naval y promoción cultural.