La Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada Molina, encabezó la ceremonia cívica por el 40 aniversario del sismo del 19 de Septiembre de 1985 y el octavo del 2017, en un evento en el que destacó la importancia de la solidaridad y la organización ciudadana.
En su discurso, la Jefa de Gobierno rindió homenaje a las víctimas y a los héroes de aquel 19 de septiembre, y subrayó que la tragedia de ese día sentó las bases para la transformación de la capital.
Realizó una remembranza del impacto del terremoto de 1985, “hoy hace 40 años, nuestra urbe vivió una de las tragedias más grandes ocurridas en sus 700 años de historia”, y señaló que, a pesar de la destrucción y la pérdida de miles de vidas, el sismo también dio origen a un nuevo espíritu en la sociedad.
“Aquel sismo se llevó las vidas de miles de nuestros vecinos, familiares, amigos, compañeros. Se estima que hubo entre 6 mil y 10 mil personas fallecidas ese día. Lo cierto es que a las y los que perdimos ese día no hemos dejado de recordarles y rendirles homenaje todos los días transcurridos desde entonces”.
Agregó que ”aquel día 48 mil familias se quedaron sin un techo, cerca de 462 edificios colapsaron abruptamente y miles de construcciones fueron demolidas”.
Enfatizó que la verdadera tragedia no fue el movimiento de la tierra, sino la vulnerabilidad causada por la corrupción y la negligencia. En este contexto, resaltó el papel fundamental de los ciudadanos ante la inacción del gobierno.
“La tragedia no fue que la tierra se moviera, sino la vulnerabilidad creada por años de corrupción y negligencia y por la parálisis de un gobierno autoritario. Ese día, frente al colapso de edificios y la ausencia de Estado capaz de responder, fue el pueblo quien salvó al pueblo”.
La mandataria capitalina destacó que la respuesta ciudadana fue la semilla de las transformaciones que definirían a la ciudad en las décadas siguientes.
“En 1985 germinó la semilla de las más importantes transformaciones, aquellas de abajo y por decisión de la gente. Los que hoy gobernamos esta ciudad somos las hijas y los hijos de la memoria histórica que hemos construido, hemos sido parte de los grandes movimientos sociales que jugaron un papel fundamental durante el sismo del 85 que no solo participaron en la emergencia, sino que lucharon por un país y un proyecto de vida diferente”.
Recordó cómo la solidaridad del 85 se manifestó nuevamente en el sismo de 2017, y destacó los avances en materia de protección civil y prevención de riesgos. Mencionó la labor de la hoy Presidenta Claudia Sheinbaum, siendo Jefa de Gobierno, en la reconstrucción y la creación de un marco legal más sólido para la transparencia.
“De aquel 19 de septiembre nació la certeza de que los fenómenos naturales son inevitables, pero no los desastres”.
Mencionó que del sismo de 1985, ”ocho meses después del terremoto, en mayo de 1986, se creó el Sistema Nacional de Protección Civil, en 1988 el Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED) y finalmente en 1991 se pusieron en operación los primeros sensores del Sistema de Alerta Sísmica Mexicano (SASMEX), un sistema pionero de las alertas sísmicas tempranas”.
”Hoy los sismos son monitoreados por uno de los sistemas más avanzados del mundo, existen altavoces en toda la ciudad y centros de atención a emergencias capaces de hacer frente a los retos que enfrenta nuestra capital y nos preparamos con los simulacros”, acotó.
Para finalizar, la jefa de Gobierno reafirmó su compromiso con la seguridad de la población y anunció un nuevo programa para reforzar la edificación de las personas vulnerables, por lo que el Gobierno de la Ciudad de México ha duplicado el presupuesto destinado a vivienda, con más de 9 mil millones de pesos.
”A lo largo de estos seis años, realizaremos 200 mil acciones de vivienda, crearemos la defensoría inquilinaria y con el programa “OTOCH” este año damos mantenimiento preventivo, mayor y rehabilitación integral a mil 200 unidades habitacionales, con una inversión histórica de 600 millones de pesos”, puntualizó.
“Nuestro gobierno impulsará un gran programa de refuerzo de edificaciones vulnerables frente a sismos para garantizar la viabilidad y seguridad de todas las viviendas y edificios de nuestra ciudad”.
La ceremonia culminó con un emotivo reconocimiento a los socorristas, bomberos, personal de protección civil, al ERUM, a la fuerza móvil prehospitalaria, a las y los policías que salvan vida, ”y a la gran potencia de la sociedad civil organizada que sirve a la ciudadanía y a nuestro gran pueblo que hace 40 años salvo al pueblo. ¡Viva la capital de la solidaridad!”, concluyó.