La Fiscalía General de Justicia (FGJCDMX) descartó fallas mecánicas en la pipa que volcó y posteriormente explotó en el Puente de la Concordia, ubicado en la alcaldía Iztapalapa el pasado 10 de septiembre, que dejó 31 personas muertas y 13 heridos.
En conferencia de prensa, la fiscal Bertha Alcalde Luján adelantó que durante la próxima semana se presentarán los primeros resultados de la investigación del siniestro en Iztapalapa; sin embargo, recalcó que el camión de Grupo Tolsa, estaba en condiciones para circular.
“Las periciales practicadas al tractocamión y a la pipa, establecieron que no presenta fallas mecánicas en llantas, frenos, ejes, ni otros componentes que pudieran haber ocasionado el accidente. Las válvulas también funcionaban adecuadamente y se encontraban cerradas, la fuga se produjo por la hendidura generada después del impacto”.
— Bertha Alcalde Luján
También aseguró que después de los peritajes correspondientes, no hay evidencia de que un bache ocasionará el accidente, pues “de acuerdo a los registros de telemetría GPS, proporcionados por la empresa propietaria, se acreditó que el tractocamión ingresó a la curva a una velocidad de entre 44 y 46 km/h, lo que coincide con los cálculos realizados por peritos en mecánica y tránsito terrestre”.
“El tractocamión golpeó inicialmente, con su parte frontal izquierda, uno de los bloques del muro de contención, lo que provocó que la pipa comenzara a ladearse hacia su costado izquierdo”.
— Bertha Alcalde Luján
De acuerdo con el último corte del Gobierno CDMX, hasta el momento suman 31 personas que perdieron la vida tras resultar gravemente heridos por la explosión, mientras que 13 personas más continúan hospitalizadas; aunado a ello, lograron identificar a dos personas más, aunque solo pudieron contactar a la familia de una de ellas.
Se trata de: Gilberto Aarón Méndez y Laura Lorena Barrera de la Torre. Esta identificación se logró, en uno de los casos, por confronta de huellas dactilares. En el caso de Laura Lorena, ya logró notificarse a la familia; y desafortunadamente, en el caso de Gilberto, aún no localizamos a la familia.