La nueva huelga en el Nacional Monte de Piedad no responde a una disputa por derechos laborales, sino al incumplimiento del propio Sindicatode los compromisos que firmó hace poco más de un año en el Convenio Modificatorio de 2024, documento que puso fin al conflicto anterior y fue avalado por la autoridad laboral y los propios trabajadores mediante voto libre y secreto, reveló una fuente cercana a la negociación del conflicto.
Dicho convenio estableció una serie de compromisos claros para ambas partes. Sin embargo, el Sindicato no sólo ha incumplido varios de los puntos que firmó, sino que optó por “reventar” el proceso con la huelga, para impedir la implementación de los mecanismos de promoción interna y asignación de puestos vacantes.
Este intento de frenar un mecanismo más justo ha sido interpretado dentro de la institución como un retroceso en la democratización interna y una defensa de privilegios perdidos.
La misma fuente explicó que ninguna prestación ni beneficio económico del contrato colectivo está en negociación ni ha sido modificado, por lo que los reclamos del Sindicato carecen de sustento legal y buscan más bien reabrir temas ya discutidos y aprobadoshace más de un año. “Se trata de una estrategia de presión, no de una defensa genuina de los trabajadores”, apuntó.
Trabajadores en contra del movimiento sindical
La huelga, que mantiene cerradas más de 300 sucursales en el país, ha generado frustración y división entre los empleados del propio Sindicato, muchos de los cuales participaron en el procedimiento de ascensos, a pesar de la advertencia de su dirigente de no hacerlo.
Durante los últimos días se han registrado manifestaciones públicas de los trabajadores en redes sociales que están en contra del movimiento sindical por tratarse dicen, de la defensa de intereses personales del Sindicato y no de sus derechos laborales.
Mientras el Sindicato sostiene su postura, los trabajadores esperan que el conflicto se resuelva pronto y que no se utilicen sus derechos como herramienta de presión política o personal. La disputa, que ya impacta a cientos de familias y a miles de clientes, revela una creciente distancia entre la dirigencia sindical y sus representados.
Por su parte, la Institución mantiene su posición de respeto al marco legal y espera que el conflicto se resuelva conforme a derecho. Mientras tanto, afirma que la seguridad de las prendas empeñadas y la atención a sus clientes por medios digitales está garantizada durante esta huelga sin fundamento.