México y China han transitado caminos paralelos durante las últimas tres décadas en materia de igualdad de género, y ahora buscan estrechar sus vínculos mediante el intercambio de experiencias y buenas prácticas en favor de los derechos de las mujeres, afirmó la secretaria de las Mujeres mexicana, Citlalli Hernández.
En entrevista con Xinhua, concedida en el contexto de la Conferencia de Líderes Mundiales sobre la Mujer, que se llevará a cabo entre el 13 y 14 de octubre en Beijing —coincidiendo con el 30.º aniversario de la IV Conferencia Mundial sobre la Mujer de 1995—, Hernández destacó que este foro representa una oportunidad estratégica para fortalecer la cooperación bilateral en temas de género.
“Nos interesa conocer de cerca las políticas públicas y programas implementados en China. Su modelo de desarrollo, con su propia cosmovisión, puede aportar aprendizajes valiosos para nuestra lucha por una sociedad más igualitaria en América Latina”, explicó la funcionaria.
Colaboración estratégica y aprendizaje mutuo
La secretaria señaló que el gobierno mexicano está abierto a construir canales de diálogo con China, con el objetivo de “adaptar a nuestro contexto” aquellos elementos exitosos que puedan reforzar el bienestar de las mujeres mexicanas.
En ese sentido, planteó la posibilidad de abrir espacios multilaterales entre China y América Latina para compartir políticas que han demostrado eficacia en áreas como:
- Empoderamiento económico
- Acceso a la educación
- Autonomía financiera
- Sistema de cuidados
- Lucha contra la violencia de género
Presentando los avances de México en Beijing
Hernández adelantó que durante su participación en la conferencia presumirá los progresos de México en lo político, social y económico. Reiteró que muchos de esos avances son el resultado de luchas históricas que se han ido articulando a lo largo del tiempo, como la conquista del sufragio femenino en 1953.
Asimismo, recordó que en los últimos siete años México ha transitado por una “transformación”, designada como la Cuarta Transformación, con el propósito de garantizar los derechos de mujeres en situación de vulnerabilidad, incluidas las indígenas, y reivindicar la diversidad cultural del país frente a décadas de políticas neoliberales.
“Mucha de nuestra agenda refiere a combatir el racismo, el clasismo y el machismo, y construir una sociedad de iguales”, apuntó la funcionaria.
Desafíos persistentes y visión de futuro
La secretaria reconoció que en México y en el mundo persisten brechas significativas: desigualdad salarial, escasa presencia femenina en ciencia y tecnología, y que muchas mujeres indígenas aún enfrentan roles tradicionales que limitan su autonomía y acceso a oportunidades.
Citlalli Hernández expresó su optimismo de que esta cumbre en Beijing se convierta en un espacio de compromiso real entre naciones, no sólo discursos, para avanzar hacia un mundo más igualitario y libre de retrocesos en derechos.