Las estafas y fraudes dirigidos a personas adultas mayores se han incrementado, y no solo provienen de desconocidos, sino también de personas cercanas como vecinos, amigos o incluso familiares, alertan autoridades.
Los estafadores aprovechan la falta de experiencia tecnológica de este grupo poblacional para manipular o controlar su dinero, advirtieron la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) y la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), que emitieron recomendaciones para evitar caer en fraudes.

Recomendaciones clave
Entre las medidas de prevención destacan:
- Aprender a usar la tecnología a su propio ritmo, mediante cursos gratuitos, talleres presenciales y videos en línea, para manejar banca en línea, cajeros y aplicaciones móviles.
- No compartir contraseñas, NIP de tarjetas, ni firmar documentos bancarios o notariales sin revisarlos cuidadosamente o consultar con alguien de confianza.
- Consultar cualquier movimiento sospechoso directamente con el banco y no responder llamadas o mensajes de números desconocidos.

Riesgos y modalidades de fraude
Según la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera 2024, solo un 6 % de las personas adultas mayores reporta problemas con productos financieros, pero su confianza y desconocimiento digital los hace vulnerables. Entre los fraudes más frecuentes se encuentran:
- Correos electrónicos falsos
- Llamadas engañosas
- Mensajes de texto fraudulentos
- Visitas sospechosas a domicilio
- Abuso de confianza por parte de familiares o conocidos, quienes pueden controlar su dinero sin su consentimiento
La Profeco y la Condusef enfatizan que las personas adultas mayores tienen derecho a tomar sus propias decisiones financieras y a recibir apoyo honesto y sin manipulación, protegiendo su autonomía y patrimonio.