La mañana de este miércoles 12 de noviembre, habitantes de Chipilo y otras zonas de Puebla fueron testigos de una inusual formación en el cielo: un gran círculo despejado entre las nubes que rápidamente se viralizó en redes sociales.
Este fenómeno, conocido como cavum o “nube perforada”, llamó la atención por su aspecto casi cinematográfico, pero en realidad tiene una explicación científica completamente natural.
“Agujero en el cielo” en Puebla
Las imágenes muestran una nube blanca grande que cubrió la ciudad durante la mañana de este miércoles 12, pero en un extremo del cúmulo gaseoso se observó un hueco o vacío, por donde se podía observar el cielo. Este fenómeno no paso desapercibido, debido a que es poco común, y los internautas y ciudadanos compartieron sus fotos en redes sociales.
Este fenómeno coincidió con otro que ocurrió durante la madrugada, con la aparición de auroras boreales visibles en el territorio nacional. Este impresionante espectáculo se generó debido a la la intensa tormenta geomagnética G4 (severa) y los estados del norte como Sonora y Zacatecas apreciaron el evento de luces.
¿Cómo se forman las nubes cavum?
El cavum se forma cuando un avión atraviesa una capa de nubes compuesta por gotas de agua muy frías, que permanecen en estado líquido a temperaturas inferiores a los 0°C. El paso de una aeronave altera el equilibrio térmico del aire, provocando que las gotas se congelen de forma repentina.
Este proceso desencadena un efecto dominó: las gotas cercanas también se congelan y, al transformarse en cristales de hielo, comienzan a caer por su peso. Esa precipitación genera el característico “agujero” circular en la nube, dejando a la vista un vacío que parece un portal en el cielo.
Aunque poco frecuente, el fenómeno cavum es completamente natural y no representa ningún riesgo. Su aparición poco común llamó la atención de ciudadanos, fotógrafos y expertos en meteorología.

