Cerca del 40% de los diputados federales decidió no presentarse este miércoles a la sesión ordinaria en la Cámara de Diputados, dejando decenas de curules vacías y confirmando que, para algunos legisladores, el periodo ordinario parece ser opcional. Aun así, la presidenta de la Mesa Directiva, Kenia López Rabadán, logró declarar el quórum con 297 asistentes, cifra apenas suficiente para comenzar los trabajos legislativos.
Aunque el pleno lucía como si hubiera puente laboral adelantado, la sesión se abrió formalmente al verificarse el mínimo requerido. Las ausencias, casi cuarenta por ciento del total, generaron dudas sobre el compromiso de los legisladores justo en un momento clave para discutir el presupuesto y diversas reformas pendientes.
Diputados ni justifican sus ausencias
Fuentes parlamentarias revelaron que al inicio de la jornada no se presentaron justificantes por las inasistencias, por lo que se espera que la Secretaría General registre oficialmente quién faltó y determine si habrá descuentos. No obstante, en San Lázaro se sabe que algunos diputados confían más en la benevolencia administrativa que en el reloj checador.
Mientras tanto, el Legislativo continúa sesionando con los que sí llegaron… y con el fantasma constante de los escaños vacíos, que hoy volvieron a recordar que, en México, a veces la silla tiene más presencia que el diputado.