El cáncer de próstata, considerado un “enemigo silencioso”, continúa avanzando en México con cifras que encienden alertas. Cada año se detectan más de 26 mil nuevos casos y más de 7 mil hombres mueren por esta enfermedad, de acuerdo con Globocan. Aunque suele asociarse con adultos mayores, especialistas advierten que también se diagnostica en menores de 55 años, lo que derriba uno de los mitos más extendidos alrededor de este padecimiento.
A pesar de que el cáncer de próstata es altamente tratable cuando se detecta a tiempo, hasta 7 de cada 10 pacientes en el país reciben diagnóstico en etapas avanzadas. Entre los factores que retrasan su atención destacan el miedo a acudir al médico, la desinformación y estigmas sobre la masculinidad, explicó el doctor José Francisco Olguín, líder médico de Oncología en Pfizer México.

Un cáncer silencioso y de alto riesgo
La enfermedad generalmente no presenta síntomas en fases tempranas. Los primeros signos pueden incluir sangre en la orina o el semen, necesidad frecuente de orinar y molestias pélvicas. En etapas avanzadas, puede provocar metástasis con dolores óseos, pérdida de peso, cansancio y debilidad en extremidades.
Asimismo, los especialistas recuerdan que uno de cada seis mexicanos podría desarrollar este tipo de cáncer, por lo que recomiendan que a partir de los 40 años los hombres acudan a revisiones anuales, especialmente quienes tienen antecedentes familiares.
Mitos que retrasan el diagnóstico
Diversas creencias erróneas dificultan la detección temprana:
- No solo aparece en hombres mayores
- No es una sentencia de muerte: la supervivencia a 5 años supera el 98% cuando se detecta a tiempo
- Las pruebas de detección sí son útiles, incluyendo el análisis de PSA y el examen rectal digital
- La vasectomía no aumenta el riesgo
- Los tratamientos no siempre provocan incontinencia urinaria

Innovación médica en México
La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) aprobó recientemente una nueva terapia de Pfizer para el cáncer de próstata, talazoparib, que amplía las opciones médicas disponibles. El tratamiento adecuado deberá ser determinado por un especialista, de acuerdo con las características de cada paciente.
El llamado de los oncólogos es claro: romper los tabúes, acudir a revisiones preventivas y combatir la desinformación. En México, donde la mayoría de los casos se detectan tarde, la prevención sigue siendo la herramienta más efectiva para salvar vidas.

